GUADALAJARA, MÉXICO.- Las autoridades mexicanas encontraron este lunes más restos óseos y objetos cortopunzantes en un predio del estado de Jalisco (oeste), en el marco de las pesquisas para localizar a cinco jóvenes secuestrados el pasado 11 de agosto, informó la fiscalía.
Se trata del segundo descubrimiento de este tipo, luego de que el 18 de agosto se anunciara el hallazgo de restos óseos y cuatro cráneos con rastros de incineración en una finca abandonada de la localidad de Lagos de Moreno, donde fueron raptadas las víctimas, de entre 19 y 22 años.
El operativo de este lunes se desarrolló en una propiedad del mismo municipio, donde policías y agentes de la fiscalía encontraron “cinco machetes, dos armas punzocortantes, una motosierra, un marro, entre otros indicios, así como múltiples segmentos óseos”, indicó la fiscalía en un comunicado.
Las autoridades forenses trabajan en la identificación de los restos para determinar si corresponden a los jóvenes, cuyo cautiverio fue difundido en violentas imágenes que generaron conmoción.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó el pasado viernes que los muchachos fueron “posiblemente asesinados”. Este martes, su gobierno presentará un informe sobre el avance de las investigaciones.
En una fotografía publicada la semana pasada en redes sociales se observa a los cinco arrodillados y maniatados, mientras en un video se ve el momento en el que uno de ellos es atacado con un objeto contundente y un cuchillo cerca de otros cuerpos que yacen en el suelo.
Jalisco es el estado de México con mayor número de personas desaparecidas, con unas 14.800 de un total de 110.000 casos registrados desde 1962, según datos oficiales. En la región también abundan denuncias sobre reclutamiento forzado por parte de los cárteles del narcotráfico, que libran una guerra entre sí.
De 2018 a 2023, en el estado han sido ubicadas 141 fosas clandestinas.
El pasado 6 de junio, los restos de ocho trabajadores de un centro de atención telefónica que habían sido reportados como desaparecidos fueron localizados en bolsas en una fosa clandestina en Zapopan, un suburbio de la ciudad de Guadalajara, capital de Jalisco.
El gobierno federal de México ha registrado más de 420.000 asesinatos y al menos 100.000 desaparecidos desde finales de 2006, cuando lanzó una ofensiva militar antidrogas.