Managua, Nicaragua
El diputado sandinista Gustavo Porras, un político de confianza del mandatario Daniel Ortega, asumió este lunes la presidencia del Parlamento nicaragüense, durante la inauguración de la legislatura 2017-2022, dominado por el oficialismo.
Porras dirigirá la Asamblea Nacional (congreso) junto a cinco directivos del gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda), uno del Partido Liberal Constitucionalista (PLC, derecha) y otro de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN, derecha).
'Daremos de esta Asamblea Nacional una expresión viva y genuina del diálogo', dijo Porras, cercano a la influyente primera dama, la vicepresidenta electa Rosario Murillo, según fuentes políticas.
El FSLN cuenta con 71 de los 92 escaños legislativos tras las elecciones nacionales del pasado 6 de noviembre, mientras que la derecha tiene 21.
'Con sus 71 votos, el FSLN puede aprobar leyes ordinarias, reformas parciales a la constitución, convocar a una constituyente, hacer todo lo que se le ocurra', dijo a la AFP el exdiputado, abogado y dirigente opositor José Pallais.
La oposición más fuerte al gobierno, integrada por la derecha liberal y la disidencia sandinista, no estará representada en el nuevo parlamento, ya que se le impidió participar en las elecciones por un cuestionado fallo judicial.
Ortega y Murillo asumirán funciones este martes en un acto en la plaza de la Revolución de Managua.
El diputado sandinista Gustavo Porras, un político de confianza del mandatario Daniel Ortega, asumió este lunes la presidencia del Parlamento nicaragüense, durante la inauguración de la legislatura 2017-2022, dominado por el oficialismo.
Porras dirigirá la Asamblea Nacional (congreso) junto a cinco directivos del gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda), uno del Partido Liberal Constitucionalista (PLC, derecha) y otro de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN, derecha).
'Daremos de esta Asamblea Nacional una expresión viva y genuina del diálogo', dijo Porras, cercano a la influyente primera dama, la vicepresidenta electa Rosario Murillo, según fuentes políticas.
El FSLN cuenta con 71 de los 92 escaños legislativos tras las elecciones nacionales del pasado 6 de noviembre, mientras que la derecha tiene 21.
'Con sus 71 votos, el FSLN puede aprobar leyes ordinarias, reformas parciales a la constitución, convocar a una constituyente, hacer todo lo que se le ocurra', dijo a la AFP el exdiputado, abogado y dirigente opositor José Pallais.
La oposición más fuerte al gobierno, integrada por la derecha liberal y la disidencia sandinista, no estará representada en el nuevo parlamento, ya que se le impidió participar en las elecciones por un cuestionado fallo judicial.
Ortega y Murillo asumirán funciones este martes en un acto en la plaza de la Revolución de Managua.
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