COLORADO, ESTADOS UNIDOS.- Personas recluidas en un centro de detención de migrantes en la ciudad estadounidense de Aurora, en Colorado (centro-oeste), denuncian falta de protección frente a casos de covid-19 en sus dormitorios, según una queja presentada este lunes por oenegés ante las autoridades.
En un comunicado, alguien identificado como Camilo afirma que no le hicieron una prueba de detección de covid-19 “a pesar de haberlo pedido e incluso después de que 13 personas en su dormitorio dieran positivo y él presentaba síntomas como dolor de cabeza y de garganta, tos, dificultad para respirar y fiebre durante al menos cinco días”.
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Otro llamado Musa declara que durante la cuarentena “la gente golpeaba las puertas porque se les negaba atención médica”.
La denuncia contiene declaraciones de personas detenidas o liberadas recientemente de las instalaciones, cuyas identidades fueron protegidas.
Fue presentada por el Consejo Estadounidense de Inmigración (American Immigration Council), Rocky Mountain Immigrant Advocacy Network, Immigrant Justice Idaho y Mariposa Legal ante la Oficina del Inspector General, la Oficina de Derechos Civiles y Libertades Civiles y el Departamento de Seguridad Nacional.
La queja también describe negligencia médica con los enfermos de covid-19 y “amenazas de represalias contra las personas detenidas si hablan con sus abogados sobre el brote actual” en el centro de detención.
Un detenido identificado como Afuom afirma temer “represalias si habla demasiado sobre las condiciones inseguras”. “Si te quejas de las condiciones o dices que hablarás con tu abogado, el personal reacciona negativamente”,asegura.
Leticia, también citada en el comunicado, sostiene que “aunque las personas a menudo están enfermas”, solo ve que se les haga la prueba de covid-19 cuando “van a ser deportadas”.
Los relatos de los detenidos en Aurora “demuestran un fallo sistemático” por parte del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para proteger a las miles de personas actualmente bajo su custodia y cumplir con los estándares de prevención de la propagación del covid-19 en esta instalación, advierte en el comunicado Katy Murdza, directiva de defensa del Consejo Estadounidense de Inmigración.
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“Ni que decir tiene que las personas detenidas, sin libertad de movimiento o de acción para protegerse, afrontan el mayor riesgo de infección y reinfección”, añade, por su parte, Maria Andrade, directora ejecutiva de Immigrant Justice Idaho.