Tapachula, México.- Un total de 21 migrantes de países como Cuba, Ecuador, India, Venezuela Azerbaiyán y Sudán, fueron hallados en un hotel de la comunidad costera de Puerto Madero, estado de Chiapas, sureste de México, por agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE), en coordinación con la Secretaría de Seguridad del Pueblo y el Instituto Nacional de Migración (INM).
En un comunicado, la Fiscalía dijo este lunes que la búsqueda de los migrantes se llevó a cabo como respuesta a una denuncia anónima, en la que se informó que en un hotel de Puerto Madero se encontraban personas extranjeras confinadas en contra de su voluntad.
Al llegar al lugar, las autoridades entrevistaron a los migrantes, quienes aseguraron “no estar privados ilegalmente de su libertad”, y ante ello se les solicitó la documentación que acreditara su estancia legal en el país.
Ante la falta de dichos documentos, agentes del INM los trasladaron a un albergue temporal, en conformidad con los procedimientos establecidos, según dieron a conocer las autoridades.
Por otra parte, la Secretaría de Seguridad del Pueblo desmanteló una serie de cámaras de videovigilancia clandestinas en coordinación con agentes de la FGE, del INM y de la Guardia Nacional, en los municipios de Frontera Hidalgo y Suchiate.
El gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, explicó en un mensaje en redes sociales “que estas cámaras servían a una célula delictiva para cometer actos ilícitos como extorsiones y secuestros, principalmente a personas migrantes”.
Las 30 cámaras fueron instaladas en diferentes puntos de los municipios de Frontera Hidalgo y Suchiate, así como en las entradas a los poblados Zaragoza y Ciudad Hidalgo.
Los objetos asegurados fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes para dar inicio a las investigaciones pertinentes en contra de quien o quienes resulten responsables.
Desde octubre de 2018, y a pesar del endurecimiento de la vigilancia en la frontera sur de México, cientos de miles de migrantes de Centro y Suramérica, el Caribe y de países de África y China han entrado en el territorio mexicano con el objetivo de llegar a Estados Unidos.
Los traficantes de personas buscan rutas para los extranjeros que en ocasiones se estacionan en los estados de sur del país como Chiapas, Tabasco, Veracruz y Oaxaca, además de los del norte, que hacen frontera con EE.UU.