El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, ganó este martes en Kentucky e Indiana, de donde es originario su compañero de fórmula Mike Pence, en tanto su rival demócrata Hillary Clinton se impuso en Vermont, según las cadenas de TV estadounidenses.
Aún era pronto para determinar un ganador en los estados de Carolina del Sur, Georgia y Virginia, entre los seis primeros cuyos centros de votación cerraron a las 00H00 GMT.
Trump ganó también las elecciones en West Virginia, que otorga cinco votos electorales. La entidad fue una de las principales fuentes de apoyo para el empresario durante las primarias republicanas.
Es popular por prometer recuperar los empleos relacionados al carbón. Hillary Clinton ha sido rechazada en el estado principalmente por realizar comentarios que fueron percibidos como una afrenta a la industria.
La dinámica ha resultado en uno de los pocos estados en los que los republicanos no se apartaron del empresario y en su lugar incrementaron su apoyo. Muchos demócratas en otras contiendas, incluyendo las del Congreso, trabajaron para distanciarse de Clinton y se rehusaron a expresarle su apoyo.
West Virginia ha votado por los candidatos presidenciales republicanos en cada una de las últimas cuatro elecciones generales.Se requieren 270 votos electorales para ganar la presidencia.
Históricas votaciones
Millones de estadounidenses votaron este martes para elegir a Hillary Clinton como su primera mujer presidenta o entregar el poder al impulsivo magnate Donald Trump, en un histórico duelo entre dos candidatos antagónicos que mantiene en vilo al mundo.
Al fin de una larga y reñida campaña plagada de insultos y ataques personales, los estadounidenses deben escoger como presidente entre una experimentada política y un 'outsider' populista.
Aunque Clinton, de 69 años, mantiene una corta ventaja de 3,3% según RealClearPolitics, Trump, de 70, aún puede triunfar. Las oficinas de votación ya han cerrado en seis estados, pero no se sabrá quién es el ganador hasta las 03h00 GMT del miércoles.
Por primera vez en la historia, el voto latino, que rompe récords cada cuatro años debido al crecimiento de la población, puede ser decisivo y ayudar a Clinton a alcanzar la Casa Blanca.
El miedo a una victoria de Trump, que ha dicho que los mexicanos son 'violadores' y 'narcotraficantes', y que si es elegido, construirá un muro en los 3.200 km de frontera con México y deportará a los 11 millones de indocumentados del país, ha movilizado a los hispanos, la primera minoría del país.
La mayoría de los latinos votan a Clinton, pero tradicionalmente acuden poco a las urnas.
Sin embargo, las encuestas muestran que el gigante dormido se está despertando. El voto hispano anticipado en Florida subió 75% en relación a 2012, en gran parte a los puertorriqueños que se han exilado en Estados Unidos. Y es muy difícil que Trump gane si es derrotado en Florida.