Turquía confirmó el derribo de un avión de guerra ruso el martes, apuntando que había entrado sin permiso en el espacio aéreo turco y que ignoró sus repetidas advertencias. Rusia, por su parte, niega que la aeronave cruzase la frontera aérea siria.
Rusia dijo que el aparato, un Su-24, fue derribado por fuego de artillería, pero Ankara explicó que sus F-16 dispararon contra la aeronave tras ignorar varias de sus advertencias.
Moscú dijo que los pilotos activaron sus paracaídas para ponerse a salvo pero agregó que no se han tenido más contactos con ellos.
Imágenes de video del incidente mostraron al avión en llamas antes de estrellarse en una colina. Además se podía ver a dos miembros de la tripulación poniéndose aparentemente a salvo gracias sus paracaídas.
La agencia de noticias turca Dogan dijo que dos helicópteros rusos buscaban a los dos pilotos con vuelos a baja altura cerca del lugar del siniestro.
El avión fue alertado en 10 ocasiones en el lapso de 5 minutos, explicó.
