Investigadores estudian fluorescencia en mamíferos
125 especies de mamíferos fueron estudiados por investigadores y se encontró un patrón: las áreas de piel y pelaje de colores claros tenían una fluorescencia uniforme
Un murciélago de nariz tubular bajo luz negra. Un sondeo reciente halló 125 mamíferos con fluorescencia.
Por: Cara Giaimo/ The New York Times
Al principio, parecía ser otro capricho de dos animales de por sí inusuales: se descubrió que las ardillas voladoras y los ornitorrincos eran fluorescentes, al absorber luz ultravioleta invisible y reemitirla en un rosa intenso o azul verde brillante.
Pero distan mucho de ser los únicos. De acuerdo con un artículo publicado en la revista Royal Society Open Science, los leones, los osos polares, las zarigüeyas de cola escamosa y las picas americanas también emiten fluorescencia. Lo mismo ocurre con todas las especies de mamíferos que los científicos pudieron examinar.
Aunque este sondeo de especímenes de museo no revela ningún beneficio evolutivo extenso, revierte la idea de la fluorescencia en los mamíferos como una peculiaridad ocasional. Más bien, parece que este rasgo es “lo predeterminado”, dijo Kenny Travouillon, curador de mastozoología en el Museo de Australia Occidental y autor principal del artículo.
Los investigadores estudiaron 125 especies pertenecientes a más de la mitad de las familias de mamíferos existentes.
Junto con colegas de la Universidad Curtin, en Perth, el equipo utilizó un espectrofotómetro para exponer los especímenes a la luz ultravioleta y analizar la fluorescencia emitida.
Los investigadores notaron un patrón: las áreas de piel y pelaje de colores claros tenían una fluorescencia uniforme.
El vientre y las orejas claras de un koala tenían una fluorescencia verdosa. Las alas desnudas, las orejas y la hoja nasal de un murciélago fantasma emitían un color amarillo pálido. Hasta el pelaje blanco de un gato doméstico emitía un leve resplandor.
La mayoría de las veces, la fluorescencia procedía de estructuras hechas de queratina no pigmentada, como el pelaje blanco, la piel desnuda de las almohadillas de las patas, o púas, garras y bigotes. Un ualabí con albinismo brillaba con un azul “súper intenso”, dijo Travouillon, mientras que un delfín girador enano emitía fluorescencia sólo en los dientes.
Como en el pasado, el descubrimiento de seres vivos fluorescentes UV plantea una pregunta complicada: ¿pueden los mamíferos detectar estos resplandores en la naturaleza?
El equipo descubrió que los animales nocturnos tenían más fluorescencia en términos de superficie que los diurnos.
Además, “las especies de presa tienden a tenerlo en el vientre, pero los carnívoros tienden a tenerlo en la espalda”, dijo Travouillon, sugiriendo un posible efecto de brillo bajo la luz de la luna que podría ayudar a los depredadores a reconocer su propia especie.
Pero es difícil imaginar alguna utilidad para algunos animales, como el topo marsupial del sur, que es ciego y pasa su vida completamente bajo tierra, dijo Travouillon.
Innes Cuthill, profesor de ecología conductual de la Universidad de Bristol, en Inglaterra, que no participó en el estudio, dijo que debería acabar con la idea de “que la fluorescencia en los animales es necesariamente una señal”.
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