Leyendas del rock buscan su ayuda
Andrew Watt, guitarrista y destacado productor musical, combina su talento en el escenario con la maestría de guiar a leyendas como Paul McCartney y Mick Jagger en el estudio
El productor Andrew Watt ha sido nominado a un Grammy por su trabajo con los Rolling Stones. (Adali Schell para The New York Times)
Por Alex Pappademas / The New York Times
Una noche de septiembre, Eddie Vedder estaba en el escenario de un concierto en California, contemplando un mar de rostros expectantes.
Vedder y su banda, los Earthlings, habían hecho una pausa para que los paramédicos pudieran atender a un integrante del público en problemas. Una vez que la situación pareció resuelta, consultó con la banda; comenzarían de nuevo desde el principio.
“Um, este”, comenzó a decir Vedder —y los Earthlings arrancaron nuevamente la canción, tomando a su líder por sorpresa y pisando su reintroducción.
Vedder empezó a cantar. Se detuvo, sonrió y soltó una maldición en dirección a su guitarrista principal, un hombre de 33 años con un corte de pelo rubio decolorado que resulta ser el productor del álbum más reciente en solitario de Vedder y del siguiente de Pearl Jam, la otra banda de Vedder.
La música se detuvo con estrépito. Vedder, sonriendo, pero severo, señaló al guitarrista y lo reprendió por precipitarse. “Este es Andrew Watt”, dijo Vedder a la multitud. “Él produce los discos. ¿Pero aquí arriba, cuate? Yo mando. Yo tengo el control. Yo soy el jefe”.
En el estudio, es otra historia. Cuando no está tocando con Vedder, o como parte de algún otro grupo de estrellas, Watt es uno de los productores de rock y pop más solicitados.
Sus primeros éxitos fueron canciones para homólogos como Justin Bieber y Dua Lipa. Pero también se ha convertido en un productor de cabecera para nueva música de estrellas de rock veteranas, trabajando con artistas tan legendarios que son conocidos en todo el mundo. Elton. Mick y Keith. Hasta Paul.
A veces, una gran parte de la labor consiste en no temer decir a los íconos lo que deben hacer.
“Si acuden para hacerlo con uno, quieren retroalimentación”, dijo Watt. Si las estrellas viven lo suficiente, normalmente empiezan a cuestionarse. Caen presa de la timidez o la complacencia. Tarde o temprano, necesitan que alguien los guíe de regreso al camino.
En entrevistas, sus colaboradores elogiaron su prontitud, su capacidad para comunicarse de músico a músico y, en particular, su incansable energía.
“No es uno de esos tipos que se deslumbren ante la gente”, dijo Paul McCartney. “Él simplemente hace lo suyo”.
Pero el activo más importante que Watt ofrece a sus clientes puede ser el entusiasmo enciclopédico de un fan que sabe lo que le gustaría escuchar y tiene la confianza en sí mismo para decírselo.
Los lazos creativos se han convertido en amistades. Habla con Elton John todos los días.
Y Watt ha pasado tanto tiempo con Mick Jagger —a finales del 2022 y principios del 2023, mientras producía el último álbum de los Rolling Stones, “Hackney Diamonds”— que a veces, cuando la app de fotos de su iPhone le muestra una presentación de sus “recuerdos”, éstos son de Mick Jagger. Jagger elogió la energía de Watt y le dio crédito por haber ayudado a los Stones a superar la inercia que había impedido que la banda completara un álbum con material nuevo desde el 2005. (Los Stones y Watt están nominados a la mejor canción de rock en los Grammy en febrero por el sencillo “Angry” de ese álbum).
“Hay gente en la industria que me dice: ‘¿Por qué trabajas con gente mucho mayor que tú?’”, dijo. “Trabajar con los cuates que escribieron el libro —te permite aprender mucho. Todavía tienen mucho qué ofrecer al mundo”.
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