Preocupación en la OTAN por posible regreso de Trump y defensa colectiva

Por Steven Erlanger/The New York Times

WASHINGTON — Los miembros europeos de la OTAN dicen que deben hacer más para defenderse al cambiar Estados Unidos su enfoque hacia Asia.

La posibilidad de que el ex Presidente Donald J. Trump regrese a la Casa Blanca eleva las preocupaciones, dadas sus amenazas de retirar la defensa colectiva de los países que no pagan sus gastos en la OTAN.

Hay más que podrían hacer los europeos para reducir la dependencia de EU, dijeron funcionarios de la OTAN y analistas durante una reciente cumbre de la alianza en Washington. Eso incluye comprometer más dinero a la defensa, aumentar la fabricación de armas y coordinar la compra de sistemas de armas que pudieran reemplazar los ahora proporcionados únicamente por los estadounidenses. Estas son cuatro lagunas que los europeos deben llenar si va en serio.

Diez años después de que los miembros de la OTAN se comprometieron a gastar el 2 por ciento del producto interno bruto en el Ejército, dos tercios lo harán para fin de año. Pero un tercio no. Y aunque Jens Stoltenberg, Secretario General de la OTAN, insiste en que el 2 por ciento “es un piso, no un techo”, todavía faltan muchas tablas, incluyendo España e Italia.

Los aliados europeos más importantes, como Gran Bretaña, Francia y Alemania, no se han comprometido firmemente a gastar al menos 2 por ciento o más a largo plazo, mientras que lo que realmente necesita la defensa europea es un 2.5 por ciento o incluso un 3 por ciento.

La cuestión principal es la sostenibilidad, dijo Camille Grand, ex subsecretario general de la OTAN. “Los europeos lo han hecho mejor, pero aún quedan muchos interrogantes”, incluyendo qué pasará con los presupuestos en Gran Bretaña y Francia al darse importantes cambios políticos.

Los ejércitos europeos se redujeron después de la Guerra Fría. Alrededor de 100 mil soldados estadounidenses se encuentran ahora en Europa, un aumento después de la invasión rusa de Ucrania, pero ese número inevitablemente disminuirá.

“Los ejércitos europeos son demasiado pequeños para manejar incluso las armas que tienen ahora”, dijo Jim Townsend, ex subsecretario de Defensa de Estados Unidos. “Los británicos y los daneses, por citar dos ejemplos, son buenos ejércitos, pero no podrían mantener un combate intenso durante más de un par de semanas”.

El nuevo modelo de fuerzas de la OTAN, acordado hace dos años, pretende disponer de más de 300 mil soldados para responder a cualquier contingencia en un plazo de 30 días (y más de 100 mil en un máximo de 10 días) para reforzar inmediatamente el flanco oriental de la alianza en caso de una crisis. Pero los funcionarios de la OTAN admiten que es considerablemente inferior a esa cifra.

Para que Europa se defienda debe llenar algunos costosos agujeros que el Departamento de Defensa de EU ahora maneja para la OTAN, dijo Grand, quien escribió un reporte sobre el problema para el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.

Las principales dependencias son lo que se denomina “facilitadores estratégicos”. Incluyen defensa aérea y antimisiles integrada, artillería y misiles de precisión de largo alcance, aviones cisterna de reabastecimiento de combustible, aviones de transporte, aviones de vigilancia, sofisticados drones y satélites de inteligencia.

De acuerdo con un estudio del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, las fuerzas europeas también tienen importantes lagunas en fuerzas navales y municiones, evidentes en su incapacidad para suministrar a Ucrania proyectiles de artillería básicos en las cantidades necesarias.

Ucrania no sólo ha demostrado vívidamente que los arsenales de armas “han sido demasiado pequeños y que la capacidad de producción ha sido deficiente, sino que también ha demostrado graves lagunas en nuestra interoperabilidad”, dijo Stoltenberg en la cumbre de este mes. “No hay manera de proporcionar una defensa fuerte sin una industria de defensa fuerte”.

La OTAN confía en el paraguas nuclear estadounidense como máximo disuasivo contra un ataque ruso, pero inevitablemente surgen dudas sobre la voluntad de utilizar armas nucleares para defender a Europa.

Gran Bretaña sólo posee un elemento de disuasión nuclear basado en submarinos. El Presidente Emmanuel Macron de Francia ha dicho que los intereses de su País tienen “una dimensión europea”. Pero la doctrina nuclear francesa es estrictamente nacional y actualmente no desempeña ningún papel en los planes nucleares de la OTAN.

¿Estaría dispuesto a colocar activos nucleares fuera de Francia? ¿Estarían dispuestos los aliados no nucleares a albergar instalaciones nucleares, a llevar armas nucleares en sus aviones o a invertir en más defensa antimisiles? ¿Debería haber algún tipo de “Eurobomba” y quién la controlaría?

“Al menos tomemos en serio este debate”, dijo Grand.

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