Se celebra hoy, 14 de abril, el Día de las Américas, instituido el 14 de abril de 1890, en el marco de la celebración de la Primera Conferencia Internacional Americana, en la que se creó la Unión Internacional de Repúblicas Americanas, que más tarde se convertiría en la Organización de los Estados Americanos (OEA).
La fecha sirve para recordar y exaltar los objetivos de sus creadores, los cuales eran la unión, la solidaridad y la cooperación entre los países del continente americano, pero también el fomentar el diálogo, la paz, la cooperación y la resolución pacífica de conflictos entre los países del hemisferio occidental; y promover el respeto a la soberanía, la paz y los derechos humanos entre las naciones americanas.
Hoy, 135 años después, el cumplimiento de todos y cada uno de los objetivos de los impulsores de la importante fecha se han visto enfrentados a obstáculos que han frenado el desarrollo de cada uno de sus países.
Problemas como la corrupción, la opacidad, el debilitamiento de las instituciones del Estado han profundizado en muchos de los países del llamado “continente de la esperanza” problemas estructurales como la pobreza, la violencia, la delincuencia, el narcotráfico, que ahuyentan la inversión extranjera y nacional, reducen la generación de empleo y frenan el desarrollo de sus países, de sus poblaciones.
Los retos de la América de hoy son muchos y pasan indiscutiblemente por el respeto a su institucionalidad y el fortalecimiento de sus democracias, para poder así enfrentarse a esos retos ineludibles de sus sociedades, como superar las desigualdades sociales y económicas en sus poblaciones, los retos que demanda el cambio climático, el respeto de los derechos humanos, el acceso a la tecnología y la prosperidad compartida de todos sus habitantes.
