Editorial

Mes de la herencia africana en Honduras

Este mes conmemoramos los diversos aportes de nuestros compatriotas negros en la forja de nuestra nación con su propia y distintiva personalidad, más allá de diferencias culturales y étnicas.

Ellas y ellos contribuyen exitosamente en campos específicos del conocimiento, fortaleciendo de esa manera nuestro capital humano, base fundamental de cualquier país.

El tronco común de mujeres y hombres negros se encuentra en el continente africano, cuna primigenia de la humanidad. De África fueron capturados y reducidos a esclavitud por imperios europeos. Trasladados contra su voluntad al Hemisferio Occidental para servir como mano de obra no remunerada en plantaciones, minas, labores domésticas.

De esa cruel manera se lucraron tanto sus propietarios como las metrópolis del Viejo Mundo, en proceso de acumulación capitalista de capital, al igual que practicando la piratería a puertos y embarcaciones españolas en sus colonias de ultramar.

A Honduras llegaron las y los afrodescendientes durante los siglos de colonialismo hispano, así como en el periodo republicano, ya como libertos, procedentes de Gran Cayman, Jamaica, Belice, contratados por las empresas bananeras estadounidenses; muchos optaron por radicarse en nuestro país luego de que sus contratos laborales habían expirado.

La educación se ha constituido en el medio idóneo para su profesionalización, en ciencias, artes, deportes, beneficiando tanto a su patria como a sus núcleos familiares.

Diario EL HERALDO congratula a ellas y ellos, integrantes de nuestra Honduras, a la vez una y diversa, pluriétnica y multicultural. Este cordial saludo es extensivo para quienes hoy residen fuera de nuestras fronteras patrias pero conservan sus raíces y afectos en la tierra en que nacieron.