No todo está perdido en esta vida. Siempre hay más de una oportunidad cuando se tiene voluntad.
Así nació el Pier-2 (Muelle en arte por traducirlo de alguna forma desde el inglés). Un grupo de artistas taiwaneses en la sureña ciudad de Kaohsiung en la República de China (Taiwán), han unido esfuerzos para recuperar espacios perdidos mediante el arte.
A orillas del río Amor (Love River) y a lo largo de su muelle, este grupo de jóvenes artistas desde 2006 comenzaron un proyecto que hoy en día es uno de los espacios más agradables para visitar en la ciudad.
La restauración inició con un viejo almacén de ropa japonés que funcionó por última vez tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) y que tras su cierre se convirtió en refugio para indigentes que mantenía con mal aspecto la zona.
Estos jóvenes artistas, con el apoyo de la Oficina de Asuntos Culturales de Kaohsiung, hicieron de ese viejo almacén una peña artística llamada The Wall, Moon Theater (La Pared... teatro a la luz de luna), donde se realizan muchos conciertos todas las semanas.
Este lugar, atravesado por una ciclovía a orillas del muelle, también tiene muchos otros espacios en donde los lugareños pasan tardes inolvidables entre la fresca brisa del puerto y los sabores de la cocina taiwanesa con bebidas frías, después de dar un largo paseo en bicicleta o dar una caminata relajada y deportiva; a la vez que admiran otro sinnúmero de esculturas hechas con materiales impensados.
Con el paso del tiempo, han recuperado patios, callejas y pasadizos con ingenio propio, y de la “chatarra” han creado admirables obras de arte urbano que merecen la pena dejárselos al menos en fotos.
Es impresionante ver cómo de los viejos rieles del tren se han construido sitios de descanso con estilos particulares como una patineta, o de pedazos viejos de aluminio se haya dado vida a un árbol milenario que ahora con el paso del viento produce agradable música entre ruinas y un cultivo de maíz en honor a los dioses tradicionales de esta cultura milenaria.
Además, no se puede dejar de pasar (y sacarse fotos) por grandes monumentos hechos de desperdicios electrónicos como un guerrero, un árbol de picos de hierro, un enorme átomo hecho con contenedores viejos y una réplica de Bumblebee, el transformer de la serie de ficción.
FESTIVALES INCREÍBLES
Pier-2 es un espacio que invita a la vida. No puede más que sentirse vivo mientras transita por un lugar hermoso, del que es difícil pensar que en su momento no fue más que viejos escombros.
En los últimos años, los demás espacios restaurados por artistas que no ganan más que la expresión de sus ideas cada año (la inversión de materiales la hace el ente cultural de la ciudad), sirven como talleres para hermosas piezas de madera e incluso talleres de tecnología y juegos de video.
El lugar restaurado, además, es sede de múltiples festivales y exposiciones artísticas y culturales durante todo el año como: el Festival de Diseño de Kaohsiung, la Exposición de caracteres chinos, el festival internacional de objetos de hierro y acero de Kaohsiung, entro otros.
Tras este enorme ejemplo de voluntad, Pier-2 es el modelo a seguir por muchos otros grupos de arte que restauran los espacios perdidos en todo Taiwán.
EN HONDURAS
Nuestro país cuenta con muchos espacios similares que bien podrían se restaurados, como la antigua Penitenciaría Nacional (PC) en el barrio La Hoya en Tegucigalpa, donde incluso se podría construir una concha acústica.
Las inversiones en cultura y arte terminan siendo patrimonio de un mejor futuro generacional. Pier-2 nos da el ejemplo, Kaohsiuhg y Taiwán lo entendieron también así, y hoy son un espejo cultural y artístico para el mundo.