Honduras

La reconciliación es el primer reto para el presidente Juan Orlando Hernández

Para lograr la gobernabilidad y el desarrollo de Honduras, el presidente Juan Orlando Hernández debe lograr la unidad

FOTOGALERÍA
28.01.2018

Tegucigalpa, Honduras
Gobernar a Honduras
por dos períodos consecutivos es un privilegio que pocos han tenido y que conlleva una serie de retos.

Los cuatro año más que ganó el presidente Juan Orlando Hernández, en las elecciones del 26 de noviembre de 2017, debe tener como esencial objetivo lograr la reconciliación nacional.

Así coinciden todos los sectores consultados por EL HERALDO, avizorando que la mejor salida es comenzar un diálogo nacional e inclusivo.

Pero además hay muchas necesidades en salud, educación, pobreza, seguridad y en materia económica.

Hernández asumió su nuevo período 2018-2022 el sábado anterior bajo un ambiente crispado por las manifestaciones violentas de la Alianza de Oposición, donde el llamado sigue siendo a la insurrección.

Edgardo Rodríguez, experto en temas políticos, refirió que “en los primeros meses de gobierno el principal reto es político”.

Lea también: Unión Europea felicita al presidente Juan Orlando Hernández

El diálogo es clave para acercar a las partes políticas que mantiene una conflictividad y la reconciliación para dar muestras de fe y convicción de que los acuerdos deben cumplirse.

Juan Orlando Hernández levanta su nueva banda presidencial en el estadio Nacional.

Juan Orlando Hernández levanta su nueva banda presidencial en el estadio Nacional.

En su análisis para EL HERALDO, el presidente se tendrá que enfrentar a la oposición que no lo reconoce y, por ende, surge la necesidad de establecer un acuerdo con ellos mediante un diálogo nacional.

“De eso va a depender mucho la gobernabilidad en el período de los cuatro años del Presidente, entonces tiene que atender prioritariamente el tema del diálogo y convencer a la oposición de sentarse a la mesa”, consideró.

Al dar este paso, de forma simultánea se tiene que trabajar en el deterioro de la imagen que tuvo el país a nivel internacional después de las elecciones y que de alguna u otra manera ha ahuyentado la inversión extranjera.

Se tendrá que trabajar duro en devolver los niveles de confianza en el país, para que retorne la inversión e impulsar las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), eso es fundamental para generar trabajo.

En salud y educación, en sus primeros cuatro años Hernández no tuvo logros sustanciales, “si comparamos con el tema de seguridad, en seguridad se avanzó muchísimo, no así en salud y educación”, midió Rodríguez.

Reducción de la pobreza
Omar Rivera, de la ASJ, consideró que se debe poner especial empeño en reducir la pobreza que afecta a más del 60% de la población. Otros sectores esperan que el tema del desempleo sea prioridad en el nuevo gobierno.

El sistema educativo sigue siendo arcaico, memorista, repetitivo y no forma a los jóvenes para el trabajo, por lo cual se requieren reformas profundas.

La situación es peor en el sector salud, según Rodríguez, ya que existe la necesidad de construir más hospitales grandes y regionales para desahogar un poco a Tegucigalpa y San Pedro Sula.

Se tiene que avanzar en la dotación de medicamentos, equipo médico quirúrgico y personal médico y paramédicos de los que adolecen todos los hospitales.

Honduras también debe evaluar bien sus relaciones internacionales, ver bien con qué países le interesa mejorar sus relaciones y abrirse a nuevos mercados, como los países del sureste asiático.

Corrupción
En infraestructura se tiene que avanzar en la proyección de convertir a Honduras en un centro logístico, pero también se deben atender las carreteras de las zonas rurales.

El agro también requiere reformas más sustanciales, porque el país sigue produciendo lo mismo desde hace muchos y de la misma manera, “y de esas reformas no se está hablando en el gobierno”, advirtió. En la corrupción existen grandes retos que por medio del diálogo nacional se deben revisar.

Julieta Castellanos, exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), calificó como un gran logro la reducción de la tasa de homicidios de 86.5 a 42.8 por cada cien mil habitantes. Valoró que “las cifras macroeconómicas también fueron positivas en el gobierno anterior, aunque ahí el problema no es de crecimiento, sino de distribución de la riqueza”.

Castellanos refirió que existen puntos grises que deben ser atendidos.

Los puntos grises de conflicto están relacionados con el tema de violación a los derechos humanos que se ha aumentado ahora con la situación política por las supuestas muertes que se han registrado”.

Julieta Castellanos



“Otros puntos grises están ligados con la corrupción y el caso de los diputados”, ejemplificó.
“En la medida que -el gobierno- avance al menos en el tema de seguridad y combate a la corrupción, el acompañamiento de todos los sectores será muy importante, tal como lo fue en el pasado”.

En materia económica todo dependerá de la estabilidad o inestabilidad social que se presente en el país, explicó a EL HERALDO, Liliana Castillo, expresidenta del Colegio de Economistas de Honduras (CEH). “Si la situación no se estabiliza, el nivel de crecimiento económico no puede mantenerse en los niveles que se han proyectado en el programa monetario que ellos están considerando alrededor de un cuatro por ciento”, precisó.

Además se proyecta un nivel más alto en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que en los años anteriores se mantuvo entre tres y cuatro por ciento, debido a los altos precios del combustible y en la energía eléctrica.

Otro aspecto que debe ser un reto solucionar es el tema de los indocumentados en Estados Unidos, porque son alrededor de un millón de hondureños en el extranjero, entre Estado Unidos y España y el impacto será fuerte para la economía nacional si regresan, debido a las remesas familiares.

Vea además: Una misión exploratoria de la ONU llegará esta semana a Honduras