Graves deficiencias sufre el sistema educativo en Honduras

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Graves deficiencias sufre actualmente el sistema educativo de Honduras.

Uno de los principales problemas que atraviesa la institución pública es el recurso humano con que cuenta. En Honduras hay 64,071 docentes a nivel nacional y existe un gran déficit en el sistema. De ese total, 51,612 son permanentes y 12,459 están de forma interina.

A su vez, hay alrededor de 13,400 empleados administrativos en las tres modalidades, permanentes, por contrato y jornales. Los últimos cumplen con jornadas de trabajo, por ejemplo, los guardias de seguridad que cubren una jornada en la mañana y otro grupo en la noche. Los parámetros internacionales señalan que el 85% de los recursos se debe destinar para servicios educativos y en Honduras el porcentaje es de 52% en el nivel central. Lo anterior significa que existe un déficit de 33% de personal para el sistema educativo.

A su vez, señala que el recurso administrativo solo debe ser del 15% y en el país actualmente es del 48% en el nivel central.

Los departamentos que más profesores tienen son Francisco Morazán (11,560) y Cortés (7,654), ambos son los departamentos con más afluencia de residentes. En los 16 departamentos restantes las cantidades oscilan entre 1,000 y 4,000 maestros, varía según la cantidad de población en cada región.

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Evaluación

En la evaluación docente, el rendimiento promedio de los profesionales de la educación es del 71%.

En el nivel de prebásica, los docentes que imparten español y ciencias sociales obtuvieron un rendimiento del 73%.

El mismo porcentaje lo obtuvieron para las asignaturas de matemáticas y ciencias naturales.

En el nivel básico, los docentes de español y ciencias sociales obtuvieron un rendimiento de 80%. Mientras que en ciencias naturales y matemáticas fue de 67%. A su vez, en la evaluación de los directores de educación media salieron por debajo del rendimiento promedio.

En comprensión lectora obtuvieron 70%, en español y matemáticas fue de 67%. En ciencias naturales el rendimiento fue de 60%, en conocimientos específicos de 68% y en ciencias sociales fue de 80%.

Eso indica que se requiere capacitación y certificación de los docentes para mejorar sus competencias. Asimismo, es necesaria la contratación de más profesores para cubrir la alta demanda de estudiantes.

Actualmente, hay matriculados en el sistema educativo 2.2 millones de alumnos en los tres niveles educativos.

Todavía hay centros que son unidocentes, lo que significa que solo hay un docente para impartir clases a todos los alumnos matriculados en diferentes niveles educativos.

Hallazgos

Según un diagnóstico realizado por la Comisión Especial para la Transformación del Sistema Educativo, al cual tuvo acceso El HERALDO, se identificó que en el nivel central, 400 funcionarios ganan sobresueldos a nivel nominal. El 90% de los contratados, para consultorías o en modalidad jornal, no generan resultados, si no que sustituyen al personal de planta. También se identificó que hay personal supernumerario y con asignación inadecuada, por lo que hay duplicidad de funciones, es decir, varias personas para cumplir una sola función.

Asimismo, el 54% de las plazas administrativas en el nivel central de Educación cumplen funciones diferentes para las que fueron contratadas.

Otro factor, es que el 75% del personal con antigüedad tiene formación académica que se concentra en básica y media, es decir, no alcanzaron acudir a la universidad.

Los resultados que reflejan la calidad educativa de los estudiantes son alarmantes. En los últimos cuatro años, un estrepitoso incremento en la reprobación de los alumnos enciende las alarmas en el sistema educativo.

Lo anterior significa que en relación de 2017 a 2018, el nivel de reprobación aumentó en 41,771 alumnos reprobados. El nivel más afectado con la reprobación de estudiantes fue educación básica, en el tercer de ciclo, es decir, de séptimo a noveno grado.

Repitencia

La brecha de alumnos que perdieron el año y tuvieron que repetir el curso incrementa alrededor de 20,000 alumnos cada año. En 2015, un total de 18,690 alumnos repitieron el curso por bajo rendimiento académico y al siguiente año la cifra subió a 39,908 estudiantes.

Para 2017, el nivel de repitencia creció a 61,940 y en 2018 el comportamiento siguió igual, por lo que se registró un total de 80,776 que no pudieron salvar el año escolar. Esta situación se observa más en el nivel de educación básica, de primero a sexto grado y también de séptimo a noveno grado.

Deserción

Mientras tanto, el sistema educativo experimenta un promedio de incremento gradual que se ha mantenido en 10,000 alumnos que abandonaron las aulas en los últimos cuatro años. Las estadísticas reflejan que 47,813 estudiantes desertaron y en 2016 la cifra se elevó a 58,730. Mientras que en 2017 hubo 67,024 estudiantes que abandonaron los estudios.

Mientras que en 2018, se registró que 78,773 jóvenes renunciaron a seguir sus estudios. El nivel más afectado con el fenómeno de la deserción es educación básica (de primero a noveno grado), los alumnos de primero, segundo y tercer ciclo.

Las cifras anteriores fueron analizadas y procesadas por el Observatorio Universitario de la Educación Nacional e Internacional de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM). Las estadísticas corresponden al Sistema de Administración de Centros Educativos (SACE) de la Secretaría de Educación.

El gobierno creó en 2018 la Comisión Especial para la Transformación del Sistema Educativo y nombró a sus integrantes mediante el decreto PCM-027-2018. Sin embargo, el gremio magisterial rechaza ese decreto ejecutivo y lleva cuatro semanas de lucha para exigir la derogación de ese decreto. Los maestros denuncian intenciones del gobierno de privatización y de hacer despidos masivos. Para hoy se anuncia un paro nacional por quinto día consecutivo, por lo que no habrá clases.