TEGUCIGALPA, HONDURAS.-El martes quedó demostrado, en el día ocho del juicio, que el proceso legal contra Tony Hernández ha estado lleno de mentiras, mentiras y más mentiras por parte de cuatro narcotraficantes y criminales desesperados por obtener una rebaja a sus condenas y concretar su venganza contra quienes hicieron caer sus reinados de terror y violencia irracional.
Así lo comunicó el martes la defensa y la familia de Tony Hernández en una nota de prensa.
Señala la defensa que desde que inició este proceso se han conocido los testimonios falsos y exagerados de Víctor Hugo Díaz, alias “El Rojo”, líder del Cartel del Atlántico, confeso de 18 crímenes.
También de Alexander Ardón, alias “Chande”, líder del Cartel de los AA y confeso de 56 crímenes.
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De igual forma, de Devis Rivera Maradiaga, alias “Cachiro” y líder del Cartel de Los Cachiros, confeso de 78 crímenes, y Fernando Chan Monroy, alias “Jack” y “Primo”, confeso de 15 crímenes.
Todos estos criminales aceptaron haber traficado droga sin límites, hasta que la extradición fue aprobada y ejecutada a partir del año 2014. Ha sido evidente el odio y el afán de venganza en todas sus falsas y novelescas declaraciones, señaló la defensa.
Hoy, una vez más, la verdad ha brillado en todo su esplendor en la sala de la Corte de Nueva York.
El narcotraficante Fernando Chang ha admitido que le mintió una y otra vez a la fiscalía, cambiando su declaración cada vez que se reunía con fiscales y agentes de la DEA en preparación para el juicio.
Desde su captura en 2016 afirmó no haber conocido ni hecho negocios ilícitos con Juan Antonio Hernández.
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También admitió que nunca habló a la fiscalía sobre tráfico y posesión de armas y municiones para no sumar al menos 30 años a la condena de 262 meses de prisión que le fue impuesta.
Asimismo, reconoció que en sus primeras reuniones con la fiscalía, solo reconoció el asesinato de dos personas, pero al verse acosado por las pruebas en su contra, posteriormente reconoció haber matado a sangre fría a 15 personas en total.
“Al igual que el resto de testigos cooperantes, Fernando Chang pretendió involucrar a nuestro cliente bajo el argumento de que terceras personas eran quienes le decían que estaba involucrado en venta de drogas y armas, siendo incapaz de aportar una tan sola prueba que respaldara dichas falsedades”.