TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Eliminadas para siempre quedarán las credenciales que el organismo administrador del proceso electoral entregaba en blanco y que se constituyeron en un negocio atractivo que condujo a popularizar la frase: “se venden al mejor postor”.
Esta costumbre de la política hondureña fue cuestionada por las misiones de observación internacional, que en sus informes fijaron con desagrado cómo el otrora Tribunal Supremo Electoral (TSE) entregaba cada cuatro años estos documentos sin ninguna firma.
Tocaba a los partidos llenarlos con los nombres de sus delegados, pero los documentos que les sobraban los vendían a los mayoritarios, según denuncias de sus adversarios.
LEA: Estructura de CNE garantiza llamado a las elecciones
Augusto Aguilar, miembro del Consejo de Expertos Electorales de América Latina, e integrante de la Comisión Técnica que prepara la nueva le electoral, informó a EL HERALDO que las credenciales quedan suprimidas de manera definitiva.
“Ya no habrá credenciales”, dijo Aguilar, quien también fue presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Por su parte, el representante nacionalista en la referida comisión, Fernando Anduray, confirmó la versión de Aguilar: “Ya hicimos desaparecer las credenciales, ya no existen en la nueva ley”.
VEA: Transmisión de resultados de elecciones será con claves compartidas
“Los miembros de mesas electorales no van a ir con una credencial, los partidos nombrarán a sus miembros ante el Consejo Nacional Electoral con anticipación para que el Consejo meta los nombres de esas personas en los listados de votación de cada Junta Receptora de Votos”, añadió.
Para las elecciones generales de 2017, el ente colegiado entregó a cada partido 36,000 credenciales (para propietarios y suplentes) a efecto de distribuirlas entre las mesas, tribunales departamentales y municipales.
En su informe de observación electoral, la Misión de Observación de la Organización de Estados Americanos (OEA) dice que pudo comprobar “en numerosas ocasiones cómo algunos miembros de TED (Tribunales Electorales Departamentales) y TEM (Tribunales Electorales Municipales) apenas sabían a qué partidos representaban, cuando no confesaban abiertamente trabajar para uno diferente al que nominalmente representaban”.
TAMBIÉN: En julio comienza enrolamiento de seis millones de hondureños
