Pero, mientras la región se inmuniza contra el virus, más de 19,000 personas han muerto producto de la enfermedad, siendo Guatemala la mayormente afectada con más de 6,500 decesos; Panamá con casi 6,000 y Honduras con un poco más de 4,000.
Todos los países de la región utilizaron el mismo protocolo de vacunación: al personal de primera línea como prioridad, esto, mientras se puedan comprar más dosis para el resto de la población.
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Desde el pasado diciembre de 2020, que llegó el primer lote de vacunas a Costa Rica, hasta la fecha ya hay dosis en toda Centroamérica, son más de 300,000 personas las que se han vacunado contra el coronavirus.
Sin embargo, en la primera línea de batalla ante la pandemia también están incluidos los mandatarios para que se puedan inmunizar con la vacuna, según las recomendaciones técnicas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Pero, de las más de 300 mil personas ya inmunizadas, ¿Cuántas de esas dosis han sido aplicadas a presidentes de la región?
Hasta el momento, el único titular que se ha vacunado es el panameño Aurentino Cortizo de 68 años. El martes pasado se aplicó la primera dosis.
“Un año de pandemia duro”, dijo el mandatario tras recibir la inyección de Pfizer-BioNTech en una escuela pública de la capital panameña en el marco de la segunda semana de inmunización a las personas mayores de 60 años.
El resto de mandatarios de Centroamérica
Pese a que Daniel Ortega, presidente de Nicaragua tiene 75 años siendo el mandatario más longevo del istmo y Alejandro Giammattei con 65 años, son personas consideradas de alta vulnerabilidad por la edad, aún no se han vacunado y le han dado paso a otras personas.Costa Rica fue la primera nación en recibir las dosis desde el pasado diciembre, pese a eso su titular Carlos Alvarado aún no ha sido inoculado, lo mismo pasa con Nayib Bukele, mandatario de El Salvador.
El caso de Honduras
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández rechazó la vacuna para darle prioridad a los más vulnerables. Esto lo hizo público días antes de que la inmunización llegara a territorio nacional.'Los presidentes de los tres poderes y altos funcionarios del Estado de los países, estamos considerados dentro de primera fase para recibir vacuna coronavirus', escribió Hernández en sus redes sociales el 7 de febrero anterior. 'Pero esto no puede ser así. Debemos darle prioridad a los más vulnerables', dijo.
Al mismo tiempo invitó al resto de presidentes de los poderes del Estado a rechazarla para darle prioridad a otras personas.
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'Los ministros, viceministros, designados presidenciales y yo como presidente de la República, no haremos uso de ese espacio, dejando esas dosis disponibles para hondureños vulnerables en edad y enfermedades', anunció.
En ese sentido, dijo que 'con todo respeto invito a los otros poderes del Estado a hacer lo mismo, y a que todo alto funcionario del gobierno, como un hondureño más, sea categorizado como corresponde en este histórico proceso de vacunación según su edad y estado de salud'.
El mandatario hondureño cumplió su palabra, pues el 25 de febrero llegaron a Honduras 5,000 mil dosis de la vacuna anticovid de la farmacéutica Moderna donadas por Israel y él no se inyectó.
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Los primeros Hondureños en vacunarse fueron la enfermera Yelena Soraya Ortega Vásquez y el doctor Nolvin Guifarro, así como ellos son más de 2,600 personas del personal de Salud que recibieron la dosis inmunizante al virus.
