El país iniciará a vivir una temporada en la que la convivencia con el virus será parte de la rutina cotidiana, en especial durante el asueto en el que los encuentros del colectivo en playas, parques o balnearios serán más frecuentes sin necesariamente estar presentes las normas de autocuidado para evitar su propagación.
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Baja inmunización
Un análisis de la Unidad de Datos de EL HERALDO Plus al proceso de vacunación en Honduras indica que el 31% de la población meta (7.1 millones) cuenta con el esquema completo, mientras que el 47% tiene al menos una dosis de la vacuna anticovid.Desde que se aplicaron las primeras vacunas en el país, el 25 de febrero pasado, casi 5.6 millones de dosis se ha suministrado a la población habilitada, faltando 12 millones de fórmulas para lograr la inmunidad de grupo.
En las últimas semanas los indicadores de la pandemia se han relentizado: las hospitalizaciones bajaron de un promedio de 1,000 a 1,2000 a 700 u 800, la afluencia de los pacientes en los triajes cayó, lo que -según los médicos- se debe al efecto de la vacunación, pero la asistencia de personas a los centros de inoculación ha sido mínima.
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La persistencia de la población sin vacunar es un problema que podría desencadenar en el crecimiento de hospitalizaciones y en más muertes en combinación con el asueto.
Para Daniel Fernández, médico en primera línea, el virus llegó para quedarse, pero con la vacuna puede convertirse en una enfermedad leve. “Este virus ha venido para quedarse y nos tenemos que acostumbrar a vivir con él. Pero hay que poner obstáculos a su circulación y evitar el crecimiento de hospitalizaciones y muertes. Tenemos la herramienta para lograr que sea una patología leve, que son las vacunas”.
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¿Libertinaje o normalidad?
Tras haberlo pensado durante semanas previas, Stephany, de 34 años, ha tomado una decisión para el Feriado Morazánico: visitará a sus papás, ambos con más de 70 años, en el municipio de El Triunfo, en Choluteca. Tomó algunas precauciones como haber hecho teletrabajo durante tres semanas antes de su viaje y someterse a un examen PCR-RT, pero sabe que la prueba no es garantía absoluta.Aun así, Stephany, mercadóloga sobreviviente del covid-19, aplicará las medidas esenciales cuando esté con sus convivientes.
Y mientras Stephany cuidará la bioseguridad, la Mesa Multisectorial sugirió al Sistema Nacional de Gestión de Riesgos ( Sinager) suspender el toque de queda durante el feriado , así como de forma indefinida para dinamizar la economía nacional.
Sin embargo, prohibió la operación de bares, discotecas, conciertos y ferias patronales debido a que la enfermedad viral sigue latente. Honduras se encamina a superar los 10,000 decesos y se acerca a los 370,000 contagios.
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