El documento, con fecha 28 de enero de 2022 y con hora de las 3:42 de la tarde, detalla que se trata de una “denuncia criminal” por al menos cuatro delitos, además, pide al Ministerio Público determinar a otros responsables, ya sea por su participación como autores o cómplices.
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”Se interpone denuncia criminal por el delito de usurpación de funciones públicas, perturbación ilícita del funcionamiento de las instituciones, falsificación de documentos y uso de documento falso contra el ciudadano Luis Redondo Guifarro y otros”, detalla el documento. Además, señala, en primer lugar, a la institucionalidad del Estado, en segundo a los diputados del Partido Nacional y por último a la fe pública como los afectados. Finalmente, añade que junto a la denuncia se presentaron documentos que acreditarían los hechos y se solicita proceder al requerimiento fiscal respectivo.
El conflicto
Anteriormente, líderes del Partido Nacional como el diputado Tomás Zambrano y el exdiputado Antonio Rivera Callejas cuestionaron que durante las sesiones convocadas por Redondo los diputados de otras fuerzas políticas se sentaban en sus curules y anunciaron que podían proceder legalmente.
Esta postura fue respaldada por el analista político Olban Valladares, quien manifestó en una entrevista con Hoy Mismo que si los diputados suplentes están votando para elegir a una de las juntas y además, suplantando las curules de sus propietarios mientras estos están activos desde otro lugar, pueden incurrir en delito de usurpación.
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La crisis al interior del Legislativo se debe a que dos juntas directivas fueron juramentadas de forma paralela, una presidida por Luis Redondo, que cuenta con votos de diputados suplentes y propietarios pero que no fue reconocida por el ministro de Gobernación, Justicia y Descentralización, Leonel Ayala, puesto que al momento de las mociones él le brindó la palabra a la diputada Beatriz Valle, quien propuso a su compañero Jorge Cálix como presidente, una moción que contó con 79 votos de diputados propietarios, siendo después juramentada.
Tras finalizar la sesión, los diputados que respaldaban a Redondo procedieron a juramentarlo por su cuenta, asegurando que este “cuenta con el respaldo del pueblo” y cuestionando la forma en la que se eligió a Cálix, pues no se les otorgó la palabra para también poder presentar su moción.
Luego, adeptos a Redondo se tomaron las instalaciones de la Empresa Nacional de Artes Gráficas (Enag), lugar donde se imprime el Diario Oficial La Gaceta, donde ratificaron la juramentación de Luis Redondo y el resto de su junta directiva a través de una publicación oficial, sin embargo, la directora de este ente desacreditó la misma, por no haberla autorizado.
Esta situación ha generado desacuerdos a lo interno del hemiciclo y fuera de él, pues mantiene en vilo a los distintos sectores de la población.
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