La Secretaría de Seguridad anunció ayer la implementación de la tecnología como una nueva medida de seguridad en las unidades del transporte público.
Todas las medidas fueron ratificadas anoche mismo, mediante un comunicado público que gira las instrucciones del presidente de la República.
Arturo Corrales, titular de ese ministerio, sostuvo que entre las medidas a tomar está la colocación de sistemas de GPS, botones de pánico y cámaras de seguridad que serán monitoreadas durante todo el día. Sostuvo que los usuarios del servicio ya no tendrán que pagar el pasaje en efectivo, sino con una tarjeta prepago, que deberán comprar con anticipación.
“Si está ordenado el sector de transporte urbano, esto nos permitiría reorientar el subsidio que se les otorga a los transportistas, lo que es un ingrediente que favorece a los delincuentes. El uso de la tecnología no es la solución total, pero sin duda es una solución muy importante al problema”, dijo el funcionario.
Afirmó que al tener controlados a los autobuses, se conocerá si cumplen con sus rutas, la velocidad en que se conducen, en qué lugares se estacionan y cuánto tiempo permanecen en cada estación.
Además, mediante un comunicado, el gobierno indicó que se incrementará a 500 efectivos la Fuerza de Tarea del sector Transporte para que refuercen la seguridad a las unidades del sistema público, que también serán resguardadas por un Escuadrón Motorizado de 100 motocicletas.
Las autoridades estarían integrando el sistema de las cámaras instaladas en los buses al sistema de monitoreo de las ciudades inteligentes para poder reaccionar ante un acto violento.
Entre las medidas de seguridad también se encuentra la aplicación de pruebas de confianza a buseros y cobradores.
“Ser motoristas del transporte urbano es una licencia certificada, no basta con saber manejar, hay que pasar el protocolo de las pruebas de confianza, ayudarle a los transportistas es ayudarles a certificar a sus motoristas, la licencia certificada especificaría que esa persona está certificada para conducir las siguientes unidades que funcionarán con el sistema GPS”, explicó.
Dijo que una vez tomadas estas medidas, en los permisos de operación se explicará que las unidades funcionan por medio de GPS, las cuales están siendo monitoreadas, “no tiene porqué haber más unidades que las del GPS, lo que permite estar viendo en una pantalla en tiempo real cuántas unidades de transporte están operando, si hay más unidades que las de GPS, quiere decir que las otras no tienen permiso de operación”.
Corrales recomendó a los propietarios de los busitos brujos que se legalicen ya que nadie puede trabajar al margen de la ley. “Esta tecnología va a invertir fondos de la tasa de seguridad”, detalló.
El funcionario reveló que ya existe la plataforma tecnológica que realizará el monitoreo permanente de las unidades del transporte, por lo que la modernización del servicio será en un corto plazo.
De acuerdo a cifras de la Secretaría de Seguridad de Honduras, alrededor de 550 militares saturaron desde ayer las principales terminales y unidades del transporte urbano en la capital de Honduras.
En el Distrito Central operan alrededor de 1,400 buses del sistema urbano, 7,300 taxis y hay 44 terminales del transporte urbano y 77 puntos de taxis colectivos registrados oficialmente.