Tegucigalpa, Honduras
El Dendroctonus frontalis, conocido como “gorgojo de pino”, se ha convertido en los últimos meses en la peor amenaza para el bosque hondureño.
La plaga que en un solo árbol se puede contabilizar hasta 500 mil, ha afectado hasta la fecha a 442,390.89 hectáreas a nivel nacional, según datos proporcionados a EL HERALDO por el Instituto de Conservación Forestal (ICF).
En los últimos días los ataques al bosque de pino han bajado considerablemente, y los técnicos especialistas en plagas del ICF aseguran que ha sido de hasta un 40 por ciento.
Esa baja en el ataque a los árboles se debe a los cambios de temperatura y las lluvias que se han registrado, pues esos factores contribuyen a que la reproducción del gorgojo sea menor y que puedan volar a distancias menores o más cortas.
Solo corte
Para combatir el gorgojo, solo existe un mecanismo que es el corte de árboles, mecanismo del que fue testigo EL HERALDO.
En el proceso se utilizan motosierras, ya que se considera que es lo más efectivo para evitar la propagación de los insectos hasta las plantaciones que se encuentran sanas.
Vicente Espino, especialista en plagas del ICF, detalló que los cortes se realizan en franjas de árboles sanos que pueden ser entre los 50 y 70 metros.
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“Cuando detectamos un brote de plaga lo que procede es notificar al propietario del terreno, si es propiedad privada, para que en el término de tres días pueda hacer el control del gorgojo”, comentó Espino.
El proceso que realizan los técnicos es una visita de campo y si se encuentra la plaga se entrega una notificación al propietario del predio donde se le hace saber que existen árboles infectados de gorgojo.
En la misma notificación se indica que tiene tres días para iniciar y realizar el control, y si no tiene la capacidad económica puede autorizar al ICF para realizar el corte de los árboles sin incurrir en ningún costo.
Cuando el dueño del terreno donde se ha detectado el brote de gorgojo de pino no está de acuerdo en realizar el control se llevan a cabo los procedimientos legales donde interviene el Ministerio Público junto a las Fuerzas Armadas para poder ingresar a los sitios donde existe la afectación por la plaga y poder hacer el corte de los árboles.
Cuando los árboles se cortan, los pequeños gorgojos no pueden volar y se mueren al ras de la tierra.
Los técnicos han experimentado con químicos para controlar el gorgojo, pero ese mecanismo no ha dado resultados, por lo que a las plantaciones de pino no les ha quedado de otra que ser cortadas con motosierras, tal y como lo constató EL HERALDO.
Agresividad
El Dendroctonus frontalis es la especie de gorgojo más agresivo que existe en el bosque de pino, pues el ataque inicia en la copa hasta llegar al tronco de la planta.
Mientras que la otra especie que es el Dendroctonus aporoximatus el ataque lo inicia en el tronco a unos dos metros de altura de la tierra.
Estas especies se fortalecen con las altas temperaturas debido al cambio climático, por lo que la reproducción es muy frecuente.
Con la llegada de la temporada lluviosa, se espera que disminuya la afectación en todo el país, pues bajan las temperaturas y la lluvia no permite que los insectos vuelen a largas distancias, por lo que baja la agresividad de la plaga.
En algunos casos se observa que los árboles de pino se encuentran sanos, pero se deben cortar para garantizar que el control del gorgojo es efectivo y evitar que se extiendan a zonas.
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La madera
En relación a la madera de pino que ha sido cortada, los propietarios de los terrenos pueden utilizarla, pero tomando en cuenta algunas normas técnicas del Instituto de Conservación Forestal.
Se detalla que aprovechar la madera debe ser a través de una licencia no ambiental que es otorgada por las autoridades del ICF a los propietarios de los predios que han sido talados.
Mientras que en los sitios ejidales y nacionales, lo que se hace es que los gobiernos locales y nacional comercializan la madera para leña o para biomasa.
En la carretera que conduce al departamento de Olancho, con frecuencia se ve que las trozas de pino se encuentran en la orilla de la calle, pues los árboles han sido cortados y comercializados con personas que procesan el producto.
También se observan las rastras cargadas de la madera de pino, la cual es transportada a los aserraderos de la zona.
Preocupación
Una de las principales preocupaciones que tienen las autoridades gubernamentales es que en los sitios donde se han cortado millones de árboles los campesinos o ganaderos aprovechen los predios para sembrar granos básicos o pastos.
Por lo que se recomienda que se debe realizar procesos de reforestación por parte de las autoridades.
En aquellos casos donde han quedado algunos árboles de pino en pie, porque no han sido atacados por el gorgojo, significa que son resistentes a la plaga, por consiguiente la semilla de los mismos servirá para regenerar el bosque y esas plantas también serán más resistentes a la plaga.
