En los últimos años se ha reportado un alto número de nacimientos de tiburones con dos cabezas. La polémica surge cuando ni siquiera los científicos encuentran una explicación para esta deformación.
Antecedentes
Hace un par de años, en Florida, un pescador capturó un tiburón hembra que estaba embarazada de un feto bicéfalo -con dos cabezas-. En 2008, otro pescador encontró el mismo caso en el océano índico.
Los investigadores abrieron un huevo para estudiar al espécimen. Según el líder del proyecto Valentín Sans-Coma, es poco probable que un animal con estas condiciones sobreviva el tiempo suficiente como para que alguien pudiera encontrárselo por ahí.
Las explicaciones más probables señalan desordenes genéticos, problemas de metabolismo, contaminación o una disminución de la reserva genética de estos animales, afectada por el alto nivel de pesca. Esto llevaría a la endogamia, provocando anormalidades genéticas.
Los casos de tiburones de dos cabezas son complicados para la ciencia y por eso cada vez más personas se preguntan qué hay detrás de estas mutaciones.
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