Luego del traslado de 37 reclusos de la Penitenciaría Nacional de Támara hacia la cárcel de máxima seguridad El Pozo, se podrían generar actos de rebeldía, advierte el experto siquiatra Javier Uclés.
Este cambio drástico de un centro penal donde tenían 'ciertas libertades' a pasar al confinamiento indudablemente tendrá una fuerte reacción, afirmó el experto al ser consultado este jueves por EL HERALDO.
'Dificilmente este tipo de personas pueden caer en depresión -como sucedería con otros-, debido a su forma fría de ver la vida; sin embargo, esto los va a incomodar, y su aptitud será de rebeldía', aseguró.
Y esto no se limita a los reclusos, según el siquiatra, 'también de las familias de los reclusos se pueden esperar reacciones'.
Sin embargo, lo que realmente es preocupante, señala Uclés, es que los 'grupos a los que pertenecen estos reclusos podrían presentar represalias al gobierno'.
Consultado por EL HERALDO, el doctor Uclés señaló que el traslado de los reos es una afrenta o confrontación del gobierno a las bandas delictivas, y es así como será interpretado por estos grupos.
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'No se pueden descartar mensajes directos e indirectos contra el gobierno, luego de esta decisión', dijo Uclés a EL HERALDO.
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Presos están lejos de deprimirse
No hay duda que en las personas que fueron aisladas hay indignación y enojo, porque se les ha quitado privilegios, prebendas, beneficios y concesiones, considera Uclés.
'El hecho de ahora estar solos, y no tener con quién hablar, podría generar que más de alguno se deprima un poco y resulte angustiado o desesperado'.
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No obstante, 'no creo que ellos se depriman, ya que son personas frías, lo que si habrá es mucha cólera y enojo'. No se puede descartar huelgas de hambre, apuntó.
Con la medida, así como para los reclusos puede resultar molesta, mucha gente estará complacida por su traslado, puntualizó.
Cabe recordar que el gobierno de Honduras ha determinado en los últimos meses trasladar a varios reos a cárceles de máxima seguridad con el objetivo de frenar los crímenes que se cometen desde el interior de estos centros penales.
Y es que de acuerdo con un informe reciente dado conocer por la Fuerza Nacional Interistitucional (Fusina), más del 80 % de los crímenes son planificados y ordenados desde la cárceles, en ese sentido se han tomado fuertes medidas contra los grupos delictivos que operan en el país.
De igual forma el gobierno ordenó una serie de normas y nuevas disposiciones al cual deberán someterse los prisioneros de alta peligrosidad, en este caso, los traslados hacia la cárcel El Pozo en Santa Bárbara.
