Investigación
Tegucigalpa, Honduras
La sombra de la criminalidad volvió a pasar por la colonia La Pradera y dejó una nueva estela de luto y dolor.
Luis Fernando Álvarez Jiménez (17) se convirtió en la novena víctima de la ola de crímenes que se ha desatado en los dos últimos meses en contra de menores que residen en dicha colonia.
Luis Fernando fue asesinado bajo el mismo patrón con que ultimaron a los otros ocho niños el pasado mes de abril.
Los nueve infantes fueron privados de su libertad en La Pradera por individuos que los subieron por la fuerza a vehículos y se los llevaron para matarlos a las cañeras y otros sitios solitarios donde dejaron sus cuerpos.
A todos los menores les han quitado la vida a balazos y con saña. A Luis Fernando lo mataron la noche del martes en un lugar solitario en el sector de El Polvorín, a inmediaciones de la 33 calle sureste.
En el hecho resultó herido otro menor que también reside en La Pradera, quien está interno en un centro asistencial de la ciudad y fuera de peligro.
El crimen
Los familiares y amigos del menor ultimado que llegaron a la morgue de Medicina Forense a acompañar a Geovany Álvarez, padre del infortunado jovencito, relataron que a eso de las 8:00 pm del martes, Luis Fernando salió de su casa ubicada en la colonia Planes de Calpules 2, del sector La Pradera, rumbo a una pulpería.
El menor iba a comprar un refresco y una cartulina para hacer una maqueta de un trabajo en grupo que estaba haciendo con sus compañeros del tercer curso de plan básico que cursaba en el colegio Sergio Reyes Caballero de esa zona.
Dijeron que, según versión de testigos, a los dos menores los subieron a la fuerza a un carro unos individuos y se los llevaron. Poco tiempo después la Policía fue informada de que en el sector de El Polvorín, a la altura de la 33 calle, se escucharon varios disparos.
Las autoridades policiales informaron que sobre el cadáver de Luis Fernando dejaron un mensaje en un pedazo de cartulina que decía: “La 18 no mata menores”.
Lo obligaron a hacer rótulo
Una pariente del infortunado niño dijo que a Luis Fernando lo obligaron a escribir el rótulo que dejaron sobre su cadáver porque la letra era la de él.
Dijo que supuestamente el pedazo de cartulina en el que hicieron el rótulo es parte de la que compró el menor para hacer su trabajo del colegio.
Geovany Álvarez, padre del victimado, indicó que Luis no andaba en malos pasos. Su hijo le ayudaba en los trabajos de soldadura.
Habla el herido
El menor, de 16 años, que resultó herido en el hecho en que murió Luis Fernando manifestó que él estaba platicando con un guardia y de repente llegaron unos individuos que les dispararon.
Dijo que solo miró a un tipo que andaba puesta una gorra. El menor no quiso entrar en detalle sobre los hechos.
El comisionado de policía, Quintín Juárez, quien es el jefe regional de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional (Fusina), dijo que investigan el posible vínculo de la muerte del menor Luis Fernando Álvarez con los otros crímenes de niños que residían en la colonia La Pradera.
Juárez manifestó que no se descarta que la muerte de Luis Fernando esté vinculada a los otros crímenes de niños, por el mensaje que dejaron en la escena del crimen.
Los otros ocho niños han sido ultimados en esas mismas circunstancias en el mes de abril y mayo. Entre las víctimas figuran Carlos Iván Merlo (11), Luis Edgardo Hernández Argueta (13), Keneth Castellanos (7) y Antony Castellanos (13). Los dos últimos eran hermanos.
