Uno de los tiempos de respuesta más rápidos del Sistema Nacional de Emergencias 911 fue registrado el pasado 9 de agosto, exactamente a las 12:39 del mediodía.
Ese día una operadora del call center recibió una llamada en la que se alertaba sobre un tiroteo frente a la Escuela Hossana, en la calle principal a Los Laureles, al suroccidente de la capital de Honduras.
Una segunda llamada recibida casi al mismo tiempo detalla que no solo se trata de un tiroteo sino de un asesinato.
La mujer al teléfono le explica a la operadora que frente a la escuela Hosanna fue tiroteada una camioneta color café que impactó en el muro del centro educativo.
En la llamada se escucha a la dama indicándole a otra persona que llame a la Policía Nacional y a la ambulancia porque no se sabe si la víctima ha fallecido.
Otras dos comunicaciones, una de una persona ligada al centro educativo y otra de un hombre que dijo ir a bordo de un bus, también reportaron el hecho criminal.
Tras recibir las comunicaciones, los operadores alertaron a los enlaces de la Policía Nacional y de la Policía Militar sobre lamentable hecho. El crimen era el del presidente de la juventud liberal, Kevin Ferrera.
El tiempo de respuesta en este hecho fue de 4 minutos, pero 15 minutos después de llegada de la policía se confirmó la muerte del también abogado.
“En casos como estos es bien difícil que el 911 actúe, porque un asesinato puede ocurrir en cualquier momento”, comentó el agente de análisis del 911 a EL HERALDO mientras permitía escuchar las grabaciones.
“Es por eso que el sistema se enfoca en prevenir el delito, en dar respuestas a incidencias antes de que se conviertan en algo que lamentar”, agregó el experto.
Sin embargo, recordó que el centro de videovigilancia del 911 actúa en casos como estos para dar seguimiento a los hechores y así colaborar en la investigación de los entes de seguridad del Estado.
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