Tegucigalpa, Honduras.- Un grupo de personas se presentó este viernes al Departamento de Medicina Legal y Ciencias Forenses para reclamar el cadáver del presunto pandillero abatido a disparos por militares tras un enfrentamiento armado en la colonia La Laguna, al norte del Distrito Central. Sin embargo, no pudieron demostrar su parentesco.
La información fue confirmada por Lorena Cálix, vocera de Medicina Forense, quien atendió a los supuestos familiares de Wilmer Javier Núñez Flores, fallecido durante el enfrentamiento con los militares.
“EL HERALDO fue testigo de la conversación que mantuvimos con estas personas, en su mayoría mujeres, quienes han venido a reclamar los restos de este joven. No obstante, se les explicó que, de momento, es imposible entregar el cuerpo porque no se ha podido acreditar legalmente su parentesco con la documentación requerida”, explicó Cálix.
La vocera indicó que se les detalló el protocolo establecido y que será el director del departamento, junto con sus asistentes, quien tomará una decisión al respecto, misma que será comunicada a los interesados.
Asimismo, adelantó que, mientras no se presente un familiar directo del fallecido con los documentos necesarios, el cuerpo permanecerá bajo la custodia del Departamento de Medicina Legal y Ciencias Forenses, con los cuidados correspondientes.
Enfrentamiento
En menos de 48 horas, se registró un segundo enfrentamiento entre agentes de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y pandilleros, que dejó un saldo de dos personas fallecidas en la colonia La Laguna de Comayagüela.
El incidente ocurrió durante el velorio de un supuesto pandillero abatido el miércoles en la colonia Brisas de Olancho, generando tensión y alarma entre los habitantes de la zona.
Según información preliminar, un grupo de militares patrullaba cerca del centro comunal donde se realizaba el velorio, lo que provocó molestia entre los familiares y miembros de la pandilla.
La situación escaló rápidamente cuando los pandilleros comenzaron a atacar a los uniformados, desatando un intenso tiroteo. Durante el enfrentamiento, un militar perdió la vida debido a múltiples impactos de bala, mientras que un pandillero, identificado como Wilmer Javier Núñez Flores, también falleció en el lugar.
Las demás personas presentes en el velorio abandonaron el lugar tras los hechos. Desde el miércoles, la presencia militar fue constante en la colonia La Laguna y sus alrededores, con patrullajes y retenes para prevenir represalias de los grupos criminales.
El jefe del Estado Mayor Conjunto, Roosevelt Hernández, declaró: “Vamos a estar permanentemente las 24 horas, de tal manera que erradicaremos de La Laguna esas estructuras criminales que están desafiando a la República y a toda la población hondureña”.