El Juzgado de Letras de lo Penal ordenó este jueves prisión preventiva contra Cristian Javier Lobo Bulnes, hijo del presidente de Honduras, Porfirio
Lobo Sosa, quien está acusado por el delito de violencia doméstica y amenazas.
Lobo Bulnes fue presentado esta mañana en audiencia de declaración de imputado, luego de la cual el juez ordenó que fuera remitido a la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto de Támara, al norte de la capital de Honduras.
'El juez determinó darle la prision preventiva con detención judicial en el centro nacional de Támara a nuestro representado, que se le está conociendo la causa por violencia doméstica', declaró Marvin Cálix, apoderado legal de Lobo.
El abogado explicó que en la audiencia se estableció el parentezco del imputado con el gobernante de la República y los bienes que posee; sin embargo, el juez se negó a otorgarle medidas sustitutivas a la prisión.
Cristian
Lobo fue capturado a las 10:00 PM en el Centro de
Rehabilitación
Para Pacientes Alcohólicos (CEREPA), de la ciudad de
Catacamas
y luego fue trasladado a
Tegucigalpa, donde fue puesto a la orden de los Juzgados que ordenaron su captura.
En noviembre de 2012 se emitió una
orden de captura en contra del hijo del mandatario
hondureño, después que una
exnovia lo denunciara en el Ministerio Público por el delito de amenazas.
La joven ya había presentado denuncia en contra del sospechoso por el delito de violencia
intrafamiliar
por lo que Lobo
Bulnes
fue citado en la Corte Suprema de Justicia en donde se le prohibió acercarse a la joven y se le ordenó ir a barrer las calles de la capital.
Sin embargo el hijo del mandatario no cumplió estas medidas por lo que en noviembre se libró la orden de captura en su contra, pero no fue hasta anoche que se procedió a su captura.
Hace unas semanas, la Fiscalía de la Mujer exigió a la Policía ejecutar la orden judicial
de detener al sospechoso.
En agosto pasado, Cristian Lobo fue detenido
por la Policía al colisionar contra un vehículo bajo los efectos del alcohol.
La pena por el delito de violencia doméstica estipulada en las leyes hondureñas es de tres años de reclusión.
