Tegucigalpa, Honduras
Las cárceles siguen siendo la “universidad” del crimen, pues ni el temor de ser enviados a las celdas de El Pozo evita que se sigan ordenando los asesinatos de alto impacto.
Fuentes de inteligencia ligadas a la investigación del crimen del comunicador Igor Padilla, ocurrido el pasado 17 de enero en San Pedro Sula, Cortés, revelaron que dicho asesinato fue ordenado desde el centro penal de esa ciudad.
“La investigación continúa para establecer la identidad de la persona integrante de esta agrupación (pandilla 18), que desde la cárcel ordenó el crimen”, dijo la fuente a EL HERALDO.
Al consultarle sobre alias “El Romántico”, quien supuestamente ordenó a Martha Yolanda Ortez, alias “La Gorda”, llamar por teléfono a Padilla, sostuvo que “ese alias no existe dentro de la estructura de la pandilla, ellos se cambian los alias por estrategia, es por eso que seguimos investigando”.
Sobre la liberación de la mujer dijo que “lamentablemente ella dijo eso al ser capturada, pero ya al estar con el abogado no volvió a hablar y la única declaración que vale en un proceso penal es la que se emite ante un juez, un fiscal y la defensa, no ante una cámara de televisión, y por eso la dejaron en libertad”.
La fuente aseguró que así como se investiga a la persona dentro del centro penal, también se sigue con la investigación sobre la supuesta participación de “La Gorda” en el hecho que terminó en el asesinato de Padilla.
Audiencia
Horas después del asesinato del comunicador social, en un operativo realizado por las instituciones que integran la Fuerza de Seguridad Insterinstitucional Nacional (Fusina), se capturó a 18 integrantes de la pandilla 18, algunos de ellos habrían confesado su participación en el crimen: dos adultos y un menor de edad, específicamente. Luego de ser presentados en audiencia en los Juzgados sampedranos fueron enviados a diferentes cárceles del país.
Entre los detenidos figuran cinco menores de edad, tres varones y dos niñas, quienes fueron enviados a correccionales juveniles. En la audiencia inicial, el Ministerio Público presentará los medios de prueba encontrados sobre la presunta participación de los acusados en el crimen de Padilla, por el cual se acusó a tres personas: dos adultos y un menor.
La Fiscalía acusó a los pandilleros por los delitos de asociación ilícita, almacenamiento ilegal de armas de fuego tipo comercial, almacenamiento ilegal de armas de uso prohibido y municiones de uso prohibido, y tres son acusados por el asesinato de Igor Padilla.
El crimen
El día del crimen, Padilla se encontraba en una tienda de peluches en la colonia Suyapa de San Pedro Sula cuando recibió una llamada telefónica, salió a la calle y allí fue acribillado por sujetos fuertemente armados que se transportaban en dos vehículos.
Luego de cometer el asesinato, los criminales huyeron del lugar sin que ninguna autoridad les diera persecución. A los pocos minutos, Padilla fue trasladado hasta un centro hospitalario, donde los médicos lo declararon muerto luego de que las balas dañaran órganos vitales.
A pesar de que se capturó a varios pandilleros sospechosos del crimen, las autoridades se han negado a revelar cuál fue el móvil del crimen. Los responsables de la investigación del caso afirman que las diligencias continúan ya que todavía falta identificar a la persona que ordenó el asesinato y así conocer si hay otros involucrados en el caso.
En la audiencia inicial se estaría conociendo la participación que tuvo cada uno de los detenidos en el crimen del comunicador social.