Una persona del sexo masculino fue hallada sin vida en el interior de una vivienda ubicada en el barrio Morazán de la capital de Honduras.
El hombre fue identificado como Roberto Peña, de 55 años de edad.
De acuerdo con autoridades, el hombre tenía al menos tres días de haber fallecido.
Su cuerpo yacía cerca del portón de la entrada a la casa de habitación. Mientras que al lado del cadáver se encontró un frasco con alcohol por lo que no se descarta que su deceso haya sido producto de una intoxicación por ingesta de bebidas embriagantes.
Pese a que su muerte se dio-de acuerdo con autoridades-desde el pasado viernes, fue el olor a putrefacto lo que alertó a sus vecinos quienes llegaron hasta la casa, encontrándose con la trágica escena.