La Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA) y la Policía Militar de Orden Público decomisaron este domingo varios artefactos que se utilizarían para elaborar bombas molotov y remedios caseros en la colonia Villeda Morales, en la capital de Honduras.
El decomiso fue realizado mediante la Operación Paz y Democracia II, cuando los agentes allanaron una vivienda en poder de la pandilla 18, después de recibir una llamada anónima de los pobladores.
Según informaron las autoridades, en el interior de la vivienda se encontraban varios manuales sobre acciones terroristas, hojas donde escribieron los planes y trifolios alusivos a una operación antifraude.
Asimismo se encontraron varias banderas del Partido Libertad y Refundación (Libre), lo que podría vincular a esta institución política con grupos criminales, informaron las autoridades.
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En la vivienda también había un arma de fuego 3.80 milímetros, su cargador y proyectiles; cuatro bolsas plásticas, 86 bolsitas y un paquete conteniendo supuesta marihuana y tres puntas de cocaína, mismas que fueron llevadas hasta las oficinas correspondientes como evidencia.
Actualmente, se desconoce la identidad de las personas que estaban en la vivienda, sin embargo, se realizan las investigaciones para poder capturarlos.
En un comunicado, las autoridades informaron que quienes atenten contra alguna persona y que su fin sea causar temor será acusado por el delito de terrorismo (artículo 335), que tipifica una condena de 30 a 40 años de prisión.
Cabe mencionar, que este partido político que forma parte de la Alianza de Oposición también es vinculado con la llegada de 145 observadores venezolanos en los comicios del 26 de noviembre, de acuerdo a una denuncia realizada por Otto Reich, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio.
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El viernes anterior la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) puso en marcha la Operación Paz y Democracia II para vigilar que las elecciones generales -que se realizarán el próximo 26 de noviembre- se lleven con normalidad.
En la actualidad militares y policías realizan retenes y recorridos a pie en diferentes sectores para garantizar la paz y tranquilidad. También para impedir el transporte de armas y drogas y que personas ajenas a la democracia alteren el proceso de elecciones.
