TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En medio de cierto hermetismo, fueron retirados de Medicina Forense los restos mortales del militar Emir Noé Escoto Escoto, de 31 años de edad.
El agente de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) fue encontrado asesinado la tarde del martes dentro de una cantina, contiguo al destacamento militar al que estaba asignado.
La madre y la compañera de hogar de Emir Escoto denunciaron públicamente que a pesar de que su pariente era un militar, no lo buscaron como correspondía después del presunto rapto del que fue víctima la tarde del lunes.
Un poco más de 24 horas después de su desaparición fue encontrado muerto a solo unos pasos de donde está el operativo permanente de la Policía Militar, extremo que pone en duda la labor investigativa.
Desde la Policía Militar se dijo que intentaron ingresar a la cantina dos veces antes de encontrar al militar, pero al parecer los dueños del negocio se negaron a abrir las puertas. Fue hasta en un tercer intento que lograron entrar con una orden judicial.
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Pudo haber entrado solo
Los familiares de Escoto Escoto desestimaron que las autoridades castrenses le realizaran un homenaje en la capital al ahora exmiembro y se lo llevaron para la aldea El Tablón, Cedros, donde fue velado y luego sepultado.
Agentes de investigación manejan una segunda hipótesis en torno al caso y es que el militar habría ingresado al local por su propia voluntad, al llamado de una persona.
Este extremo es parte de las investigaciones que realiza la Policía para dar con el responsable de la muerte del agente de la Policía Militar.
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