COMAYAGUA, HONDURAS.- En el momento que comenzaría a disfrutar el producto de su esfuerzo académico, sicarios le cegaron la vida a un joven promesa en la zona central del país.
Se trata de Kelvin Eduardo Durón López, de 23 años de edad. Después de varios meses realizando la práctica profesional para graduarse de ingeniero agrónomo en la Universidad Nacional de Agricultura ( UNAG), Kelvin Eduardo asistió el sábado por última vez a la empresa a la que fue asignado en Siguatepeque.
A eso de las 12:00 del mediodía se retiró de la empresa para ir a ayudarle a su padrastro a realizar unos trabajos de albañilería y horas después retornaron a su casa en el barrio Sinaí, de esta ciudad. Cuando eran alrededor de las 7:30 de la noche, el ingeniero in fieri salió de su casa para ir a comprar un jugo y golosinas a una pulpería cercana en el mismo vecindario.
El estudiante de agronomía expiró casi al instante tras recibir varios impactos de bala en la espalda y rostro.
Mientras tanto, otro joven de los que departían en la pulpería también murió a causa del tiroteo y fue identificado como Dorian Jared Ramírez Graneros (19), quien había sido deportado de Estados Unidos hace un mes.
El acongojado hombre contó que debido al desempeño de su vástago, los dueños de la empresa exportadora de café y comercializadora de fertilizantes donde hizo la práctica le dieron una plaza de trabajo, empleo que comenzaría como ingeniero en los próximos días.
Sus restos mortales serán sepultados este lunes en el municipio de San Jerónimo, Comayagua.
Se trata de Kelvin Eduardo Durón López, de 23 años de edad. Después de varios meses realizando la práctica profesional para graduarse de ingeniero agrónomo en la Universidad Nacional de Agricultura ( UNAG), Kelvin Eduardo asistió el sábado por última vez a la empresa a la que fue asignado en Siguatepeque.
A eso de las 12:00 del mediodía se retiró de la empresa para ir a ayudarle a su padrastro a realizar unos trabajos de albañilería y horas después retornaron a su casa en el barrio Sinaí, de esta ciudad. Cuando eran alrededor de las 7:30 de la noche, el ingeniero in fieri salió de su casa para ir a comprar un jugo y golosinas a una pulpería cercana en el mismo vecindario.
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Inseguridad generalizada
En el momento que Kelvin se aprestaba a llegar al negocio, desde una camioneta en marcha, hombres fuertemente armados comenzaron a disparar contra un grupo de jóvenes que consumían bebidas alcohólicas afuera de la pulpería. Al parecer el universitario intentó correr para evitar ser alcanzado por los proyectiles, pero los gatilleros también le apuntaron a él, creyendo que era uno de sus objetivos.El estudiante de agronomía expiró casi al instante tras recibir varios impactos de bala en la espalda y rostro.
Mientras tanto, otro joven de los que departían en la pulpería también murió a causa del tiroteo y fue identificado como Dorian Jared Ramírez Graneros (19), quien había sido deportado de Estados Unidos hace un mes.
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Un hijo ejemplar
Don Mauro Durón, padre de Kelvin, con lágrimas en sus ojos relató que “él era un muchacho de bien, un hijo ejemplar, sin vicios y un estudiante de excelencia académica en su universidad”.El acongojado hombre contó que debido al desempeño de su vástago, los dueños de la empresa exportadora de café y comercializadora de fertilizantes donde hizo la práctica le dieron una plaza de trabajo, empleo que comenzaría como ingeniero en los próximos días.
Sus restos mortales serán sepultados este lunes en el municipio de San Jerónimo, Comayagua.
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