Santa Bárbara, Honduras.- Hipótesis preliminares de la Policía sugieren que Darío Antonio Leiva y Liz Marien Varela, de 18 y 16 años, respectivamente, murieron por asfixia con monóxido de carbono.
Los cuerpos de ambos jóvenes fueron encontrados dentro de un vehículo en el garaje de una vivienda en la colonia El Calvario de Santa Bárbara, de donde eran originarios.
Las autoridades investigan el caso, pero la principal hipótesis apunta a que la pareja pudo haber inhalado monóxido de carbono, lo que habría provocado su fallecimiento.
La intoxicación por monóxido de carbono ocurre cuando este gas se acumula en la sangre, desplazando el oxígeno en los glóbulos rojos. Esto puede causar daño grave en los tejidos o incluso la muerte.
El testimonio de un familiar
“Tal vez nosotros no nos dábamos cuenta, pero sí tenían una relación de noviazgo”, expresó el tío de la joven.
El familiar contó que Liz Marien había pedido permiso a sus padres para trabajar en a una exposición del colegio, pero solía regresar a casa antes de las 9:00 de la noche. Al no aparecer, su familia salió a buscarla, sin imaginar el desenlace.
“Salieron a buscarla, pero solo se encontraron con eso... Estaban dentro del garaje, junto al otro muchacho que también murió”, relató.
El tío de la menor reconoció que, aunque la familia no tenía conocimiento de la relación, es probable que ambos jóvenes fueran pareja.
Familiares de Liz la recuerdan como una muchacha alegre, cariñosa y simpática.
“Todas sus metas quedaron ahí... Ella tenía muchos sueños, quería estudiar Enfermería, pero todo quedó truncado. Tal vez no contó sobre su noviazgo porque no sentía suficiente confianza”, lamentó su tío.