COMAYAGÜELA, HONDURAS.- Una nueva masacre se registró el mediodía de este sábado -4 de marzo- en Comayagüela, dejando un saldo de seis personas muertas y un hombre herido que fue trasladada hasta el Hospital Escuela.
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El sextuple crimen ocurrió aproximadamente a las 12:35 del mediodía en la séptima calle, primera avenida, en un vetusto edificio donde funciona una cuartería donde se escuchó una fuerte ráfaga de disparos.
En las imágenes de la dantesca escena se podía observar los cuerpos apilados de tres hombres y cuatro mujeres, dos de ellos a escasos pasos de los primeros. Uno aún respiraba.
De acuerdo con la información preliminar en manos de los cuerpos de seguridad del Estado, habrían sido cinco hombres los que ingresaron a la edificación ubicada en una calle sin salida colindante con el río Choluteca.
Los sicarios ingresaron de forma intempestiva a la cuartería en donde se encontraban varios de los inquilinos, quienes son en su mayoría jóvenes que pululan por las calles de Comayagüela atrapados por el alcoholismo.
En cuestión de minutos, los pistoleros tirotearon a siete personas, muriendo seis de ellas en el acto. A unos metros de donde se dio la balacera está ubicado el edificio principal de la Cruz Roja Hondureña, por lo que varios paramédicos se movilizaron rápidamente, sin embargo, seis de los agredidos ya estaban muertos.
Una séptima persona víctima del tiroteo fue llevada en estado grave al Hospital Escuela (HE), a bordo de una ambulancia de la Cruz Roja Hondureña. Fue identificado a priori como Kelvin Godoy.
Los cuerpos de las víctimas se observaban juntos en un rincón con incontables orificios de bala en el cuerpo.
De momento ninguno de los fallecidos ha sido identificado, mientras que la persona herida fue ingresada a la sala de emergencia en estado delicado pues llevaba múltiples disparos.
Cristhian Nolasco, portavoz de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), informó que “lamentamos lo que está pasando, nos toca activar todos nuestros equipos; ya hay equipos de investigación e inteligencia criminal para hacer las primeras reacciones”.
Debido a la magnitud del hecho violento, Nolasco detalló que se está practicando una operación denominada “candado”, para bloquear todas las salidas de Comayagüela para trata de dar con los criminales.
Se investiga si esta nueva masacre está relacionada con el tráfico de drogas; la venta de drogas al narcomenudeo que se da en esa zona de la capital.
