SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Tres personas perdieron la vida de forma violenta este martes 1 de enero de 2019, en menos de nueve horas, en
San Pedro Sula, zona norte de Honduras.
La primera víctima, que departía con su familia durante las celebraciones de Año Nuevo, pereció minutos después de la medianoche.
El joven, identificado como José Arriaga, murió tras recibir un disparo en la cabeza. El crimen se suscitó en el sector de la López Arellano; aún se investiga el móvil.
Posteriormente, a eso de las 6:00 de la mañana, el cadáver de un hombre fue hallado en la colonia Sandoval de San Pedro Sula.
El infortunado fue identificado por los vecinos solamente como 'Chicas'. Su cuerpo inerte, que fue abatido a disparos, quedó tirado a escasos metros de su vivienda.
De manera preliminar trascendió que se dedicaba a trasladar personas ilegalmente a través de las fronteras (coyote).
Finalmente, el cuerpo de un joven que oscila entre los 15 y 18 años fue encontrado con signos de asfixia y tortura en la carretera que conduce hacia Ticamaya, específicamente en el sector de San José del Boquerón.
El infortunado, que aún permanece como desconocido, vestía un jean azul, una camisa blanca y unos zapatos negros.
La primera víctima, que departía con su familia durante las celebraciones de Año Nuevo, pereció minutos después de la medianoche.
El joven, identificado como José Arriaga, murió tras recibir un disparo en la cabeza. El crimen se suscitó en el sector de la López Arellano; aún se investiga el móvil.
Posteriormente, a eso de las 6:00 de la mañana, el cadáver de un hombre fue hallado en la colonia Sandoval de San Pedro Sula.
El infortunado fue identificado por los vecinos solamente como 'Chicas'. Su cuerpo inerte, que fue abatido a disparos, quedó tirado a escasos metros de su vivienda.
De manera preliminar trascendió que se dedicaba a trasladar personas ilegalmente a través de las fronteras (coyote).
Finalmente, el cuerpo de un joven que oscila entre los 15 y 18 años fue encontrado con signos de asfixia y tortura en la carretera que conduce hacia Ticamaya, específicamente en el sector de San José del Boquerón.
El infortunado, que aún permanece como desconocido, vestía un jean azul, una camisa blanca y unos zapatos negros.