Actualmente, los abonados del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) que se abastecen de las represas Los Laureles y La Concepción reciben el vital líquido cada cinco días, mientras que las más de 160 colonias al noreste de la ciudad cuya fuente de abastecimiento es la planta potabilizadora El Picacho lo recibirán cada cuatro días.
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Así lo estimó Héctor Sevilla, gerente del SANAA, quien explicó que conforme a las revisiones técnicas que realizan cada mes, el calendario podría replicarse en enero. El pronóstico de lluvias, la calidad del agua cruda, las fuentes superficiales y los niveles de los embalses Los Laureles y La Concepción son los cuatro elementos que las autoridades del SANAA toman en cuenta al momento de definir cómo será la distribución del vital líquido.
Los años 2019 y 2020 resultaron ser los más críticos en cuanto a la distribución de agua en los últimos 10 años. Fueron 15 meses de severos racionamientos, donde el servicio llegó a tardar hasta nueve días en llegar a los hogares capitalinos, incluso hubo algunas colonias como la Nueva Suyapa donde el agua llegaba hasta dos veces al mes, según recordó Carolina Briceño, residente de ese sector de la capital.
En 2021, la distribución se redujo en los tiempos de espera, pero la población sigue aquejando la falta de compromiso de las autoridades en la construcción de nuevos embalses, puesto que el último en edificarse fue La Concepción en el año de 1993. Desde entonces no se ha construido ninguna represa de igual o mayor capacidad que las existentes.
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En el presente año, los meses con mayor racionamiento fueron marzo y junio, donde la distribución fue cada seis días; seguidos de julio, agosto, septiembre y diciembre, donde el vital líquido llegó cada seis días. El resto de los meses, los capitalinos recibieron el servicio de agua potable cada dos y tres días.
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Comparación
En 2020, Los Laureles cerró con una capacidad de 10.4 millones de metros cúbicos, eso representa un 99% de su capacidad total. En cuanto a la represa La Concepción su nivel fue de 34.6 millones metros cúbicos, es decir, un 95.83% de su capacidad total. Entre ambos sumaron 45 millones de metros cúbicos, es decir un 96.5% de capacidad total en los dos embalses.Los volúmenes que se manejaron en 2020 no obedecieron a la llegada de los fenómenos tropicales Eta y Iota, sin embargo, su paso por la ciudad contribuyó a que las represas se mantuvieran llenas durante los últimos dos meses de 2020.
A la fecha, Los Laureles tiene un volumen de 6.6 millones de metros cúbicos, lo que se traduce a un 63.5% de su capacidad total. Mientras que La Concepción se mantiene a 23.4 millones de metros cúbicos, eso significa que tiene un 65% de su capacidad total. Entre ambas acumulan 30 millones de metros cúbicos y mantiene un porcentaje de 64.5% de su capacidad total. En comparación a diciembre de 2020, actualmente hay un desfase de 15 millones de metros cúbicos de agua.
“No queremos que se repita la misma situación a principios de 2020 cuando hubo una emergencia nacional de agua. Preliminarmente esperamos que para enero no haya cambio en el calendario, sino que se mantenga cada cinco días para Los Laureles y La Concepción, y cuatro días para El Picacho”, dijo Sevilla, al tiempo que reconoció que el subsistema El Picacho es el que representa mayores problemas porque se abastece de fuentes superficiales que dependen de las lluvias.
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