TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Para alejar el fantasma de la sequía con una solución definitiva, en la capital se requieren nuevos proyectos de agua.
Especialistas consultados por EL HERALDO estiman que además de los 46 millones de metros cúbicos que aportan La Concepción y Los Laureles, se requieren como mínimo otros 60 más. La comuna, en los últimos años, menciona la represa del Río del Hombre, en la carretera a Olancho, como parte de la solución definitiva a los problemas de abastecimiento.
Además, otra alternativa con mayor posibilidad de pronto inicio es captar agua del río Jiniguare y trasladarla hasta La Concepción.
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Las obras
Sobre la línea de conducción Jiniguare, Manuel Membreño, director de Control y Seguimiento de la municipalidad, detalló que podrían mover hasta 200 litros de agua por segundo.
“Ya estaba la licitación pero se cayó, la volveremos a lanzar en los próximos días”, anunció.
En cuanto a la represa del Río del Hombre, adelantó que sería similar a La Concepción, con una capacidad de 40 millones de metros cúbicos, no obstante el proyecto aún sigue “en estudios preliminares”.
“No sabemos el tamaño, para lanzar la licitación dependemos de los resultados del estudio, es probable que sí (inicie la licitación en julio), pero por el momento no tengo una respuesta contundente”, explicó.
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Más allá de esas dos propuestas, el proyecto que ya inició con la preparación del terreno es el embalse San José.
El ingeniero detalló que “la capacidad será de diez millones de metros cúbicos con un volumen adicional de uno a dos millones en presas de retención de sólidos al final de la presa”.
Según los estimados de las autoridades capitalinas, más lo que ya tenemos, la captación del vital líquido podría llegar hasta los 100 millones de metros cúbicos, no obstante hasta ahora lo único seguro son los 58 entre las actuales represas y lo que aportará la de San José.
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Expectativa
Para el gerente del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), Héctor Sevilla, cualquier inversión de proyectos de agua futuros es positiva.
En ese sentido, mencionó que entre los beneficios se enlista el tener el servicio de agua potable todos los días “aunque sea por unas horas”.
Asimismo, atender la población que no cuenta con servicios de agua directamente del SANAA.
“Recordemos que la población ha crecido, tenemos más de un millón y medio de habitantes, ante ese crecimiento y necesidades, es importante desarrollar proyectos concretos como San José, el reservorio de El Picacho y los futuros”, mencionó Sevilla.
En la actualidad, el 30 por ciento de abonados reciben agua de Los Laureles, que está a un 42 por ciento de su capacidad. Por su parte, el agua de La Concepción es distribuida a un 45 por ciento de la población y permanece a un 55 por ciento de su capacidad, es decir unos 20 millones de metros cúbicos.
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