Comayagüela, Honduras
El caos y la informalidad toman ventaja con la llegada de la temporada navideña en la capital.
La mayor zona de desorden está entre la primera y séptima avenida de Comayagüela, pues solo en esta zona se han instalado más de 3,000 vendedores ambulantes y un aproximado de 300 carretilleros.
El principal problema es que los peatones deben caminar cerca de las vitrinas de los ocultos comercios no para comprar, sino para lograr evadir los puestos informales que se han tomado las aceras.
Lo mismo pasa con la calzada pues, sumado al desorden vial, los comerciantes informales se han apropiado de la calle con sus productos.
Los intentos de parte de las autoridades locales para recuperar los espacios públicos de las ferias informales han sido tantos como sus fracasos, pero este año anunciaron que a partir del próximo lunes 3 de diciembre no habrá contemplaciones ante el desorden.
Mercedes López, gerente interina de Orden Público, dijo que el espacio permitido para hacer las ventas en plena calle es de 1.5 metros por 1.5 metros.
“Esta semana vamos a tener una reunión con los dirigentes de las asociaciones de vendedores para ordenar la zona, vamos a notificar a los comerciantes para que corten esos puestos que están exageradamente grandes”, manifestó López.
Las multas establecidas en la Ordenanza Municipal sobre Vendedores Informales en el DC van desde los 300 hasta los 1,000 lempiras. Y a quienes reincidan se les cancelará de manera definida el permiso de operar en la zona. Hasta la fecha no se han concedido más permisos para la venta informal.
Además se harán trabajos en conjunto con las autoridades de Movilidad Urbana y de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) para mantener las vías despejadas.
Zona de caos
EL HERALDO hizo un recorrido por las zonas comerciales de la laboriosa ciudad gemela y constató que después de la sexta calle, en la quinta avenida el paso se reduce de forma considerable. Más adelante, en la décima calle, el paso es imposible para los conductores debido a carretas llenas de frutas y verduras y los puestos que superan el doble de la medida permitida.
Silvio Larios, gerente general de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), lamentó que el desorden en que se ha hundido Comayagüela es una de las principales causas por las que ha disminuido la inversión en la zona, por lo que urge reubicar a los vendedores en nuevos mercados.
Agregó que debe haber una mayor cooperación de los comerciantes y la construcción de estacionamientos para devolver el espíritu comercial a la zona.