TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Con el inicio del nuevo año, el 2024 trae consigo una particularidad que lo distingue: es un año bisiesto. Esta característica implica que este año tendrá un día adicional en comparación con los años comunes, que se conforman con 365 días.
Ante la curiosidad generalizada sobre qué implica exactamente un año bisiesto, aquí compartimos información relevante que puede resolver tus dudas.
¿Por qué hay años bisiestos?
La razón detrás de los años bisiestos es la necesidad de ajustar el calendario para mantener la sincronización entre el año solar, que tiene una duración de 365.2425 días y el año civil convencional de 365 días.
La acumulación de esta diferencia se traduce en un día adicional cada 128 años. Por lo tanto, se introduce un año bisiesto cada cuatro años para garantizar la precisión del calendario.
El 29 de febrero se presenta cada cuatro años, marcando el año bisiesto.
¿Qué es un año bisiesto y cada cuánto se da?
Un año bisiesto es aquel que cuenta con 366 días en lugar de 365. Este fenómeno se repite cada cuatro años.
Sin embargo, hay una excepción a esta regla: un año divisible por 100 no es bisiesto, a menos que también sea divisible por 400.
Ejemplo de ello es el año 2000, que fue bisiesto, mientras que el año 1900 no lo fue.
¿Qué significa la palabra bisiesto?
La palabra “bisiesto” tiene sus raíces en el latín “bis sextus dies ante calendas martii,” que se traduce como “repítase el sexto día antes del primer día de marzo.”
Históricamente, este día extra se insertaba en el calendario romano cada cuatro años para corregir desfases.
La distribución de los días es la siguiente:
31 días: enero, marzo, mayo, julio, agosto, octubre y diciembre.
30 días: abril, junio, septiembre y noviembre.
29 días: febrero.
Así que, mientras celebramos el inicio de este año bisiesto, recordemos que esta singularidad en el calendario agrega un toque especial y nos ofrece un día más para vivir, aprender y disfrutar de todas las experiencias que el 2024 tiene reservadas.