TEGUCIGALPA, HONDURAS-. El Miércoles de Ceniza marca el inicio solemne del periodo litúrgico de Cuaresma, un tiempo significativo para los fieles católicos en el que la reflexión y la penitencia cobran protagonismo.
Este lapso de 40 días se inicia con la imposición de ceniza, simbolizando la fugacidad de la vida y el compromiso de purificación espiritual. Ya que, es un gesto que les recuerda su propia mortalidad y la necesidad de arrepentimiento por sus faltas.
Durante la Cuaresma, se establece la práctica de no comer carne, una restricción que va más allá de una privación alimentaria.
¿Se come carne en el Miércoles de Ceniza y Cuaresma?
La respuesta es que no se puede comer carne, porque este tiempo busca apartar a los fieles de los placeres, enfocándolos en la oración y la reflexión.
De manera que, el acto de abstención no solo se limita a la alimentación, sino que abarca diversos placeres terrenales. La idea es que al renunciar a estos deleites temporales, los fieles fortalezcan su conexión con lo espiritual y profundicen su compromiso con Dios.
Origen de la prohibición de la carne en la Cuaresma
La prohibición de comer carne durante la Cuaresma tiene sus raíces en una práctica que se remonta al siglo IV en la Iglesia Católica.
En su esencia, conmemora los 40 día que Jesús pasó en el desierto, enfrentando las tentaciones del diablo. La carne, ya sea roja o blanca está vinculada al sacrificio del cuerpo de Cristo.