Señales de que podrías estar sufriendo acoso laboral sin saberlo

Este fenómeno, que a menudo pasa desapercibido, implica una serie de acciones que buscan dañar la dignidad y el bienestar de una persona en su entorno laboral

  • 30 de diciembre de 2024 a las 11:52
Señales de que podrías estar sufriendo acoso laboral sin saberlo
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Tegucigalpa, Honduras.- Un estudio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) reveló que una de cada cinco personas en el mundo enfrenta acoso laboral, también conocido como “mobbing”.

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Este tipo de violencia psicológica se caracteriza por actos repetidos y hostiles que buscan dañar a una persona en su lugar de trabajo.

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Según expertos en derecho laboral, el mobbing incluye actos como negar permisos de conciliación sin razones válidas, excluir a empleados de comunicaciones laborales, asignar tareas humillantes o excesivas, dificultar el teletrabajo y realizar comentarios que generen inseguridad o deterioren la autoestima.

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Cinco señales clave del acoso laboral

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1.- Negativa injustificada a la conciliación laboral y familiar: Cuando una empresa se niega arbitrariamente a permitir que un trabajador concilie sus responsabilidades laborales con su vida personal, podría tratarse de mobbing.

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Por ejemplo, la falta de permisos para atender situaciones familiares o cambios de horario sin justificación puede ser una forma de presionar al empleado, deteriorando su bienestar y provocando desgaste emocional.

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2.- Exclusión social en el lugar de trabajo: La exclusión de un empleado de canales de comunicación laboral importantes, como grupos de WhatsApp o cadenas de correos electrónicos, puede ser una señal de hostigamiento.

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Si estas omisiones son recurrentes y afectan el acceso a información clave para el desempeño laboral, esto podría interpretarse como un intento de aislar al trabajador del resto del equipo, lo que genera un ambiente tóxico y de desinformación.

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3.- Asignación de tareas humillantes o excesivas: Otra forma de acoso es sobrecargar a una persona con tareas imposibles de cumplir o que exceden sus competencias, generando estrés y desgaste físico y emocional.

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En otros casos, el empleador puede asignar trabajos humillantes o inferiores a la cualificación del trabajador, como una forma de menospreciarlo o hacerle sentir incompetente.

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4.- Dificultades para teletrabajar: En el contexto actual, donde el teletrabajo es una opción en muchas empresas, negar injustificadamente esta posibilidad puede considerarse una forma de acoso.

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Si una persona enfrenta trabas constantes, como la negativa de la empresa a otorgarle teletrabajo sin razones objetivas o el suministro de equipos inadecuados para desempeñar sus funciones desde casa, esto podría formar parte de un ambiente laboral hostil. Estas acciones buscan limitar el desempeño del empleado, lo que afecta tanto su productividad como su estabilidad emocional.

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5.- Gaslighting o manipulación psicológica: El “gaslighting” en el trabajo es una forma de manipulación emocional que incluye burlas constantes, exageración de errores, evaluaciones negativas injustas y difusión de rumores.

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Aunque estas acciones pueden parecer inofensivas de forma aislada, su repetición constante puede deteriorar la autoestima y el desempeño de la víctima, haciéndola dudar de sus propias capacidades.

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Consecuencias del acoso laboral

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El mobbing puede tener graves repercusiones en la salud mental y física de las personas.

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Desde síntomas como irritabilidad, tristeza y estrés, hasta trastornos más serios como ansiedad generalizada, depresión o incluso el síndrome de estrés postraumático.

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Estos problemas suelen ir acompañados de consecuencias físicas, como dolores de cabeza, fatiga crónica y trastornos del sueño, así como dificultades para concentrarse y problemas de memoria.

Qué hacer si eres víctima de acoso laboral

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Identificar el problema es el primer paso, pero también es importante tomar medidas para protegerse:

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1.- Documentar la situación: Mantén un registro de las situaciones de acoso, guarda correos electrónicos, mensajes y cualquier otra prueba que pueda servir para respaldar tu caso.

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2.- Denunciar internamente: Utiliza los canales de denuncia de tu empresa, que están diseñados para abordar este tipo de situaciones.

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3.- Buscar apoyo externo: Habla con amigos, familiares o busca ayuda psicológica para enfrentar el impacto emocional del acoso.

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4.- Consultar con un abogado laboralista: Un profesional puede asesorarte sobre los pasos legales que puedes tomar para proteger tus derechos.

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Redacción web
Redacción

Staff de EL HERALDO, medio de comunicación hondureño fundado en 1979.

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