'Hemos tomado la decisión de detener toda la publicidad política en Twitter a nivel mundial. Creemos que el alcance del mensaje político debe ganarse, no comprarse', explicó en un tuit el directivo.
'Un mensaje político gana alcance cuando las personas deciden seguir una cuenta o dar un retuit. Pagar por el alcance elimina esa decisión, forzando mensajes políticos altamente optimizados y dirigidos a las personas. Creemos que esta decisión no debe verse comprometida por el dinero', señaló en otro tuit.
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También dijo que usar la publicidad en internet conlleva riesgos porque puede usarse para influir en el voto de los usuarios y así afectar la vida de millones de personas.
Dorsey, además, apuntó que este tipo de anuncios representan un desafío debido a que todo crece a una velocidada abrumadora.
'Por ejemplo, no es creíble para nosotros decir: 'Estamos trabajando duro para impedir que la gente burle nuestro sistema para difundir información engañosa, peeeeero, si alguien nos paga para forzar a la gente a ver sus mensajes políticos... bueno, pueden decir lo que quieran!'', escribió.
El presidente de Twitter puntualizó que la nueva política será compartida antes del 15 de noviembre, y esta incluirá las excepciones que tendrá.
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