Su equipo de defensa está conformado por cinco abogados especializados en delitos económicos, incluso algunos han sido fiscales de lucha contra el crimen financiero.
Las autoridades norteamericanas lo mantienen detenido en un centro correccional en Manhattan. Funcionarios consulares guatemaltecos no han podido contactarlo.
Estados Unidos vio con satisfacción la decisión de la Corte de confirmar la extradición de Portillo para enfrentar los cargos de conspiración por lavado de dinero.