La enorme nave espacial de color blanco, recorre las calles de Los Ángeles, como si fuera un gigantesco crucero transoceánico que atraviesa de manera surrealista el paisaje urbano.
El público se congregó el viernes en las inmediaciones del capitolio, el puente Golden Gate y el cartel de Hollywood para fotografiar la llegada del transbordador montado sobre el enorme jet.