Un día como hoy, pero hace 16 años Motagua se alzó con la corona número ocho de la Liga Nacional. Fue una fría noche de enero de esas en las que el cielo se pintó más Azul que de costumbre.
Motagua y Olimpia clasificaron a la gran final del Torneo Apertura. En la ida, quedaron 0-0 y en la vuelta el partido finalizó 0-0.
Poco antes del final, Diego Vazquez se levantó de la banca y le pidió con desesperación al DT Pepe Treviño que lo metiera al campo. 'Meteme que tapo los penales' le dijo el argentino al entrenador. Treviño vio muy seguro a Diego y no dudó en hacer el cambio. Hugo Caballero abandonó y entró Vazquez. 'Diego me dijo que lo metiera, estaba completamente seguro de que iba a parar algún penal y nos la jugamos con él', dijo Treviño.
Efectivamente, Diego Vazquez vestido con una túnica de blanco y negro y con el dorsal 1 entró decidido a coronarse campeón con las águilas. Su motivación llegaba hasta arriba. Olimpia vio con preocupación el ingreso de La Barbie, un gigante de pelo largo que ya sabía lo que era ser campeón contra los Albos por lo vivido en el Clavasmitch.
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En la tanda de penales quedaron 6-5, Diego tapó dos penales y el más significativo, el de Rudy Williams que representó el campeonato. La Barbie se tiró para la izquierda y atrapó la redonda, de inmediato se arrodilló en el campo y levantó el esférico con sus manos. 'Esa noche vi el cielo más azul de toda mi vida', dijo el guardameta.
La gente se metió al campo y Diego Vazquez dio la vuelta olímpica con los hinchas, le regaló su camisa al público de sol centro, donde estaban delirando por la copa que se definió ese memorable día de enero.
En la actualidad, los protagonistas de esta historia viven momentos diferentes: Diego Vazquez es el DT de Motagua, Hugo Caballero el Preparador de Porteros y Pepe Treviño vive en su natal Monterrey.
