Un niño uruguayo vio realizado su sueño el jueves cuando tuvo la oportunidad de estar cara a cara con su ídolo, Leo Messi.
El pequeño burló la seguridad del hotel donde se hospeda la selección argentina, y a la llegada de Leo Messi se metió entre los guardias para intentar estar cerca del máximo exponente del balompié de la albiceleste.
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En ese instante y estando a pocos metros de su ídolo, los cuerpos de seguridad lo detuvieron y, con lágrimas recorriendo sus mejillas, el menor no tuvo otra opción que rendirse.
En eso el jugador se percata de la escena y le exige a los guardias que dejen pasar al niño, quien, corriendo, no pudo contener la emoción de ver logrado su sueño. Messi lo abrazó, le firmó la camisa, se tomó una foto con él y lo hizo el niño más feliz del mundo en ese momento.
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Mira aquí el video del niño y Leo Messi: