San Pedro Sula, Honduras
En la práctica de la mañana todavía se percibían las secuelas de la turbulencia generada por la inesperada partida del Choco, pero el hombre que se había ido sin dejar rastro alguno regresaba por la tarde para sembrar la calma en la concentración de la Selección Sub 23.
Es un hecho, Anthony Lozano está de vuelta en la Selección Olímpica y retornó como se fue: sin pronunciar ninguna palabra ante los medios.
El retorno causó el mismo estruendo que la partida y puso fin a un tema que ha causado preocupación en todos los sectores: aficionados, cuerpo técnico y federativos. El tema era tan alérgico para las partes involucradas que nadie quería tocarlo. “No me compete a mí, es un tema desgastante; no puedo responder acerca porque no sé nada”, decía en la mañana el volante óscar Salas, que era completado por Marcelo Espinal: “No hay nada prohibido, pero no me corresponde a mí, mi opinión me la reservo”.
Nadie aclara los hechos
La intranquilidad era tal que Jorge Salomón -presidente de la Comisión Normalizadora de la Fenafuth- se trasladó de Tegucigalpa a San Pedro Sula para llegar al entrenamiento matutino en el Estadio Olímpico.
Un apretón de manos con Jorge Luis Pinto, gestos de apoyo a los jugadores y un adelanto de que el tema Choco se arreglaría, marcaron la visita del hombre fuerte de la Federación.
“En el transcurso del día, Choco va a tener alguna comunicación con el profesor. Ha sido una situación personal de Lozano. Insisto, se resolverá”, dijo Salomón antes de que Lozano retornara, en tono de premonición. Las palabras del dirigente fueron un presagio de la vuelta del delantero del Tenerife de la segunda división de España.
Eso sí, nadie ha salido al paso para dar una versión oficial sobre las razones de la partida y a desmentir esa fuerte teoría que asevera que el atacante se alejó por un fuerte encontronazo con Pinto debido al exceso de trabajo.
Lozano se mostró sonriente
“Participar en unas Olimpiadas es un orgullo y privilegio para Honduras y debe ser eso para el Choco”, dijo Salomón antes de la vuelta de Lozano.
A su regreso a la intimidad de la Bicolor, se mostró tranquilo y, después de arribar al hotel, se trasladó al bus que llevaría a la H al estadio para el segundo entrenamiento del día. Estando en el bus, el Choco posó ante la cámara, levantó el pulgar, sonrió y se mostró muy tranquilo antes de partir a la práctica. Con Choco vuelve la tranquilidad porque la Bicolor potencia una zona en la que tiene a Alberth Elis, Romell Quioto y Kevin López... En medio de esta sacudida, la H 23 prepara un amistoso para el domingo (9:00 AM) ante el Gimnástico de la Liga de Ascenso en el Estadio Carlos Miranda de Comayagua
