Rusia puso en marcha la Copa Confederaciones de la que es anfitriona el sábado, con una victoria por 2-0 sobre Nueva Zelanda.
Tras una colorida ceremonia de música y danza, la selección rusa jugó alentada por unos 60.000, incluido el presidente Vladimir Putin. Pero en el reluciente estadio de San Petersburgo, lo locales evidenciaron problemas para definir adelante, incluso frente a la errática zaga de los “All Whites”.
Dennis Glushakov abrió el marcador a los 32 minutos, luego que Nueva Zelanda perdió un balón en la salida. El volante del Spartak de Moscú se enfiló en solitario frente al arquero y picó el balón, que se adentró lentamente en la portería mientras el propio Glushakov y un par de defensores neozelandeses lo perseguían junto a u poste.
► Un gato predecirá los resultados en la Copa Confederaciones
Fedor Smolov sacó al fin algo más de rédito del abrumador dominio ejercido por Rusia e hizo el segundo tanto a los 69, tras apoderarse del esférico cerca del medio campo y abrir la jugada por la banda derecha. Un centro y una nueva falla defensiva del equipo oceánico derivaron en que la pelota volviera a los pies de Smolov, quien simplemente la empujó hacia las redes.
Rusia quedó provisionalmente al frente en el Grupo A, con tres puntos, a la espera del resultado del encuentro dominical entre Portugal y México.
► Entrenador de Portugal 'mete las manos al fuego' por Cristiano