MADRID, ESPAÑA.- Real Madrid y Chelsea se jugarán el pase a la final de la
Champions la próxima semana tras empatar 1-1 este martes en la ida de semifinales del torneo continental.
Los ingleses se adelantaron con un gol de Christian Pulisic (14), pero a la media hora Karim Benzema puso el empate (29), que deja las espadas en alto para la vuelta en Stamford Bridge el próximo miércoles.
Tras la tormenta generada la semana pasada por el intento de creación de la Superliga, en la que ambos equipos estuvieron involucrados, Real Madrid y Chelsea parecieron dejar atrás la crisis para centrarse en alcanzar la final de la Champions.
En un partido que empezó con mucha intensidad para ir calmándose a medida que pasaban los minutos, el equipo blanco sufrió ante un Chelsea, que superó a los merengues con la velocidad de su juego, especialmente en el primer tiempo.
Timo Werner avisó pronto con un disparo a apenas dos metros de la línea de gol, que sacó Thibaut Courtois (10), dando inicio a una actuación que evitó una mayor renta de los visitantes.
El belga no podría hacer nada poco después cuando Pulisic, tras recibir a la espalda de la defensa, le recortó en su salida para poner el 1-0 (14) en el marcador.
El tanto fue un mazazo para el equipo blanco, superado por las rápidas llegadas de los 'blues', ante la imprecisa presión de los merengues.
El Chelsea ganó la batalla en el centro del campo donde N'Golo Kanté, auténtico director de orquesta de los ingleses, desbordó a Casemiro para llegar con facilidad al área contraria y asistir a Pulisic y Werner.
El francés se sacó un disparo al palo desde la frontal (23) poco antes de controlar un balón en el área con la cabeza para sin dejarlo caer marcar a la media vuelta en boca de gol el 1-1 (29).
El tanto sirvió para dar tranquilidad a los locales a los que les costaba superar la presión de los rivales.
El equipo merengue fue mejorando con el paso de los minutos, cerrando líneas y borrando los espacios por los que había hecho mucho daño durante la primera parte el Chelsea, al que le iba costando más llegar con claridad.
Los blancos empezaron a llegar más y Zinedine Zidane decidió mover el banquillo dando entrada a Eden Hazard por Vinicius (66), que apenas intervino este martes en el juego de los merengues.
El Chelsea abandonó sus rápidas salidas del primer tiempo para replegar líneas al igual que el Real Madrid, buscando los dos equipos hacerse los amos del balón y sosegando el partido.
El equipo blanco siguió intentando profundizar por los costados, especialmente por la izquierda, donde aparecían Hazard y Asensio, que había salido por Marcelo, pero le costaba encontrar los huecos en la firme defensa de los ingleses.
Los merengues terminaron apretando con sus últimas fuerzas, pero el marcador ya no se movería dejando un empate que deja todo abierto con una ligera ventaja para el Chelsea, que obligará a los merengues a salir a buscar el tanto en Stamford Bridge.
Los ingleses se adelantaron con un gol de Christian Pulisic (14), pero a la media hora Karim Benzema puso el empate (29), que deja las espadas en alto para la vuelta en Stamford Bridge el próximo miércoles.
Tras la tormenta generada la semana pasada por el intento de creación de la Superliga, en la que ambos equipos estuvieron involucrados, Real Madrid y Chelsea parecieron dejar atrás la crisis para centrarse en alcanzar la final de la Champions.
En un partido que empezó con mucha intensidad para ir calmándose a medida que pasaban los minutos, el equipo blanco sufrió ante un Chelsea, que superó a los merengues con la velocidad de su juego, especialmente en el primer tiempo.
Timo Werner avisó pronto con un disparo a apenas dos metros de la línea de gol, que sacó Thibaut Courtois (10), dando inicio a una actuación que evitó una mayor renta de los visitantes.
El belga no podría hacer nada poco después cuando Pulisic, tras recibir a la espalda de la defensa, le recortó en su salida para poner el 1-0 (14) en el marcador.
El tanto fue un mazazo para el equipo blanco, superado por las rápidas llegadas de los 'blues', ante la imprecisa presión de los merengues.
El Chelsea ganó la batalla en el centro del campo donde N'Golo Kanté, auténtico director de orquesta de los ingleses, desbordó a Casemiro para llegar con facilidad al área contraria y asistir a Pulisic y Werner.
Aparece Benzema
En medio de la tormenta, Benzema fue el salvavidas que sostuvo al Real Madrid y lideró del equipo blanco, al que ayudó la intensa lluvia que cayó sobre el Alfredo Di Stéfano, contribuyendo a tranquilizar el juego.El francés se sacó un disparo al palo desde la frontal (23) poco antes de controlar un balón en el área con la cabeza para sin dejarlo caer marcar a la media vuelta en boca de gol el 1-1 (29).
El tanto sirvió para dar tranquilidad a los locales a los que les costaba superar la presión de los rivales.
El equipo merengue fue mejorando con el paso de los minutos, cerrando líneas y borrando los espacios por los que había hecho mucho daño durante la primera parte el Chelsea, al que le iba costando más llegar con claridad.
Los blancos empezaron a llegar más y Zinedine Zidane decidió mover el banquillo dando entrada a Eden Hazard por Vinicius (66), que apenas intervino este martes en el juego de los merengues.
El Chelsea abandonó sus rápidas salidas del primer tiempo para replegar líneas al igual que el Real Madrid, buscando los dos equipos hacerse los amos del balón y sosegando el partido.
El equipo blanco siguió intentando profundizar por los costados, especialmente por la izquierda, donde aparecían Hazard y Asensio, que había salido por Marcelo, pero le costaba encontrar los huecos en la firme defensa de los ingleses.
Los merengues terminaron apretando con sus últimas fuerzas, pero el marcador ya no se movería dejando un empate que deja todo abierto con una ligera ventaja para el Chelsea, que obligará a los merengues a salir a buscar el tanto en Stamford Bridge.