Guillermo y Óscar son parte de los nuevos rostros del tenis de mesa. Con 17 años, hoy son las primeras dos raquetas de la Selección Nacional de Honduras.
Ambos, con esfuerzo propio y con el apadrinaje del COH y la Federación de Tenis de Mesa (Fenatemh), están clasificados al Latinoamericano de Tenis de Mesa de junio en Medellín, Colombia (tras ganar su clasificación el año pasado en San Salvador). Zona los visitó en un día de entrenos.
Tegucigalpa
“Nuestras ilusiones y metas están en ganar medallas, tanto por equipo como individualmente”, dice Guillermo, primera raqueta y próximo a comenzar estudios de medicina en la UNAH.
En tanto, Óscar, ya encaminado en ingeniería eléctrica en la misma universidad, considera que “nos entendemos a la perfección. Somos una pareja que ataca mucho, casi no defendemos, eso nos da ventaja con los rivales”, dijo.
A la hora de exponer cada una de sus cualidades, Óscar dice que Guillermo tiene buen toque de frente “y él (Óscar) tiene buen revés”, responde.
Entrenados por Juvini Pinzón, estos muchachos escogieron el tenis de mesa tras pasar por varias disciplinas en su etapa formativa. Hoy, ya con la seguridad y gusto por este deporte explosivo y de resistencia, quieren proyectarse a futuro y tener el protagonismo de las hermanas Medina.
“No es fácil, ellas son las más grandes. Nosotros estamos trabajando para figurar y para ser ejemplo de todos estos niños (señala las mesas aledañas) que vienen a buscar formación”, dice Muñoz.
Ambos analizan los rivales del latinoamericano. “Estamos muy fuertes en la parte mental. Son buenos rivales, pero sabemos que podemos ganar”, dice Óscar, mientras se retiran a la mesa donde la red les divide, pero una pelota y las ilusiones les une.
